Luis Enrique instaura en el banquillo un estilo diferente

Lorena García Calvo
lorena garcía calvo VIGO / LA VOZ

DEPORTES

Luis Enrique se ha mostrado muy activo durante los entrenamientos que el Celta ha realizado en A Madroa.
Luis Enrique se ha mostrado muy activo durante los entrenamientos que el Celta ha realizado en A Madroa. m. moralejo< / span>

La comunicación constante con los futbolistas, su participación en los entrenamientos y una actitud vitalista marcan el trabajo del asturiano

15 jul 2013 . Actualizado a las 15:54 h.

Dice el dicho que cada maestrillo tiene su librillo, y Luis Enrique no iba a ser la excepción. En su primera semana de trabajo al frente del Celta ya ha dejado destellos de la forma en la que trabaja para sacar lo mejor de sus jugadores. Su vitalidad sobre el césped, su disposición a participar en los ejercicios, sus constantes correcciones y directrices y sobre todo su tendencia al diálogo con los futbolistas son sus señas de identidad.

la actitud

La vitalidad de un jugador

El primer día de entreno, cuando Luis Enrique se dispuso a explicar con sus ayudantes cómo realizar los ejercicios, el nuevo técnico del Celta dejó claro que no entiende de actitudes contemplativas. Como si de uno más se tratase, hace carrera con sus jugadores, toca el balón y derrocha energía en cada ejercicio que propone y en cada corrección que realiza.

el diálogo

La comunicación es clave

Charlas, apuntes, correcciones y, en resumen, un diálogo constante es el que plantea el nuevo entrenador del Celta. «Da importancia a la comunicación, habla bastante con los jugadores y nos corrige», señala Carlos Bellvís. Desde el primer momento esa proximidad del técnico ha calado en el vestuario. «Creo que es un entrenador muy comunicativo, que dice todo a la cara y que es muy cercano», respalda David Rodríguez. Sus charlas con Borja Oubiña, sus apuntes a los juveniles o las conversaciones con toda la plantilla ya son escenas comunes. «Le gusta estar cerca del jugador, tener buen feeling con él, la verdad es que estamos contentos», valoraba el capitán del Celta. Esa sensación es compartida por Jonathan Vila, que desde el primer día de trabajo percibió que «parece un adestrador achegado ao futbolista, gústalle escoitar e dialogar co xogador». En todo caso, ese diálogo no confunde en ningún momento la cadena de mando. Él está al frente, y como muestra, el castigo a Gustavo Cabral por llegar tarde el primer día. El central entrenó toda la semana al margen del grupo.

el balón

La pretemporada

Una de las señas de identidad de la pretemporada del Celta está siendo el trabajo con balón. Lejos de las intensas cargas físicas que proponen otros técnicos, Luis Enrique se ha mostrado partidario en estos primeros días de sesiones marcadas por la intensidad, pero siempre de la mano del balón. «Son entrenamientos bastante duros, porque son intensos, pero bastante llevaderos», valora Carlos Bellvís, que agradece la presencia del esférico en el día a día. Antes de cada entreno equipo y cuerpo técnico charlan respecto a cómo se desarrollarán los ejercicios, y durante su puesta en marcha el entrenador asturiano no pierde comba. «Nos pide detalles, a lo mejor desmarques, o cómo defender, pequeñas cositas», explica Borja Oubiña. El Celta de Luis Enrique ya comienza a tomar forma.

«Da importancia a la comunicación. Habla bastante con los jugadores y nos corrige bastante»

Defensa

«Le gusta estar cerca del jugador, tener buen feeling con el,

la verdad es que estamos contentos»

Centrocampista

«Parece un adestrador achegado ao futbolista, gústalle escoitar e dialogar

co xogador»

Defensa

«Creo que es un entrenador muy comunicativo que

dice todo a la cara muy cercano»

Delantero