El Arzúa retorna a Preferente sufriendo lo indecible, en una eliminatoria con el Victoria que se resolvió en la tanda de penaltis, en un campo de O Viso que registró la mejor entrada de la temporada.
Los locales encaraban el partido de vuelta con la ventaja del gol conseguido por Albertito en la ida, en la ciudad herculina. Lo tenían todo muy de cara, pero por momentos parecía que la situación iba a dar un giro de 180 grados.
En los compases iniciales de la segunda mitad el defensa local David Enjamio marró un penalti. Y todo se complicó cuando el Victoria igualó la eliminatoria con un gol a falta de trece minutos.
No se volvió a mover el marcador, de modo que la resolución quedaba para los lanzamientos desde los once metros. Los nervios afloraron en los dos lados en la tanda de cinco: dos aciertos y tres fallos por cada bando. Hubo que esperar al séptimo penalti y ahí la moneda cayó del lado del Arzúa, que lo pudo celebrar por todo lo alto con sus aficionados.