Mundial de Brasil 2014: El primer dilema de Del Bosque será optar por Diego Costa, David Villa o el falso nueve

Dpa

DEPORTES

JONATHAN ERNST

El seleccionador baraja estas opciones para el partido de debut de la selección española el viernes ante Holanda

09 jun 2014 . Actualizado a las 20:30 h.

Llega el primer partido de España en el Mundial de Brasil y con él la primera decisión importante de su seleccionador, Vicente del Bosque: ¿jugará con el enigma que hoy supone Diego Costa, apostará por la «vieja guardia» que representa David Villa o reforzará su apuesta por el «falso nueve»? La campeona del mundo debutará el viernes ante Holanda en la reedición de la final de Sudáfrica 2010, un partido clave y exigente.

Y la elección de Del Bosque para la delantera será debatida desde que se haga pública, una hora antes del comienzo encuentro. No es ningún secreto que el mayor hándicap que tiene España está en su dificultad para hacer goles, para transformar en números su caudal de juego, control y ocasiones. Así se comprobó en los dos partidos amistosos previos a su viaje a Brasil, en los que sólo pudo ganar por 2-0 a Bolivia y a El Salvador a pesar de la endeblez de los dos rivales y del buen número de oportunidades generado.

Fernando Torres fue el titular ante Bolivia. Marcó de penalti, pero su actuación recibió numerosas críticas, tantas como su propia convocatoria. No jugó ni un minuto ante El Salvador y parece la última opción para la delantera.

Frente a El Salvador, Del Bosque reforzó su confianza en Costa, pero al final el protagonista del encuentro fue Villa, autor de los dos tantos de su equipo. Ese doblete fue el notorio grito de un futbolista que parecía con más pasado que presente, teniendo en cuenta su abandono del fútbol de elite para fichar por el New York City, donde jugará los próximos tres años.

La actuación de David Villa eclipsó a un Diego Costa que sigue generando dudas. No tanto ya por su estado físico, que parece bueno tras superar una lesión muscular, sino por su adaptación a un equipo con tan singulares características como el español.

Además, el hispano-brasileño apenas cuenta con experiencia. Sólo jugó dos partidos internacionales con España, ambos incompletos, y no marcó. Y nunca jugó un torneo como un Mundial, que tanto suele premiar la experiencia. Eso es lo que le sobra a David Villa, aunque El Salvador no es Holanda.

La tercera opción que maneja Del Bosque es la del falso nueve, una forma de generar superioridad en la medular si al final Holanda juega con tres defensas y dos laterales adelantados, como parece.

«No hay un fútbol único. Para nosotros es más importante llegar que estar. Tenemos gente muy inteligente», acostumbra a decir Del Bosque, que ante las críticas y tras ganar la Eurocopa del 2012, se cargó de razones. «No nos ha ido mal», aseguró.

Si Del Bosque insiste en ese esquema sin delanteros, tan de su agrado y que tan bien funcionó en la Eurocopa, aparece un primer candidato: Cesc Fábregas. En el Mundial intentará reivindicar una figura que salió muy dañada de la última temporada. Muy criticado por la propia hinchada de su equipo, el Barcelona, parece cada vez más claro que su futuro inmediato está lejos del club catalán. Del Bosque lo aprecia mucho y siempre destacó su «inteligencia» para aparecer en zonas dañinas del ataque.

La otra apuesta que aparece en el horizonte para esa posición del falso nueve es la de David Silva. Lesionado en la última parte de la temporada con el Manchester City, parece afrontar los días previos al Mundial en una gran forma física y técnica. Así lo evidenció ante El Salvador, dando un recital en la segunda parte. Pero ese sistema, pese a que se ha probado efectivo, genera dudas.