Hacía muchos años que Bélgica no reunía a un combinado de tanto talento como el que ha presentado en el Mundial de Brasil. Los diablos rojos han construido una escuadra que se mostró intratable durante la fase de clasificación -ocho victorias y dos empates- y que, además de un feliz presente, deja entrever en un futuro esplendoroso.
Marc Wilmots, seleccionador del conjunto belga, dispone de un elenco en el que solo Van Buyten supera los treinta años de edad. Y jugadores como Courtois, Hazard o Lukaku ya se han hecho un nombre en el fútbol europeo.
Precedente
Bélgica se midió con Estados Unidos hace poco más de un año. Fue en un amistoso disputado en Cleveland en el que los diablos rojos se impusieron por 2-4. Ahora el escenario es diferente. La oficialidad del compromiso y la posibilidad de seguir los pasos del combinado que llegó a semifinales en el Mundial de México, en 1986, pueden elevar la presión para la escuadra de Marc Wilmots.
Fortaleza defensiva
Uno de los quebraderos de cabeza del seleccionador es el estado de salud de Kompany. El central es una de las piezas maestras de la zaga del conjunto europeo. Wilmots ha reconocido que el futbolista es su «mano derecha en el campo».
No obstante, Bélgica se ha mostrado solvente en el apartado defensivo hasta la fecha. Courtois solo ha encajado un tanto en los tres primeros partidos (de penalti). Y eso a pesar de que en el último encuentro, contra Corea del Sur, actuaron en inferioridad numérica durante toda la segunda mitad.
Reto
Bélgica solo superó una vez la ronda de octavos. Fue en México. Después de vencer a España en cuartos, cayó contra Argentina, después campeona, en la penúltima eliminatoria.