
Más de un millar de aficionados disfrutaron de la inauguración de la ronda del Deportivo. La hinchada se lanzó sin rodeos a disfrutar de sus ídolos
22 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El Dépor figura desde ayer en el callejero de A Coruña. Más de un millar de aficionados acudieron a la inauguración de la Ronda del Deportivo, nombre con el que se conocerá a partir de ahora el primer tramo de la nueva vía de circunvalación de la ciudad, a la que se accede justo desde los aledaños del estadio de Riazor.
La hinchada blanquiazul, la misma que festejó por todo lo alto el regreso a Primera División el pasado mes de mayo, protagonizó por completo la jornada. A última hora de la tarde, tiñó con sus colores el protocolario acto institucional, al que también acudieron la plantilla del primer equipo, el cuerpo técnico y otros empleados del Deportivo.
Los discursos corrieron a cargo del alcalde coruñés, Carlos Negreira, así como el presidente del club y el máximo responsable de la Federación de Peñas, impulsora de la iniciativa, Miguel Otero. Los tres descubrieron juntos la placa que ahora da nombre a esta calle y coincidieron en que el acto suponía realmente un homenaje de la afición. «Nuestra admiración -afirmó el regidor- al aficionado anónimo que no espera nada, pero que se siente recompensado por cada triunfo. En Riazor se demuestra que A Coruña está viva», añadió.
De Primera
Negreira subrayó que el Deportivo da nombre «a una ronda amplia, como su historia y sus triunfos en una ciudad que siempre será de Primera». En su breve discurso, el presidente de la Federación de Peñas aseguró gozar de «un día de mucha felicidad para el deportivismo, que no entiende de partidismos». Igualmente, el presidente del Deportivo agradeció el apoyo de la afición.
Al término del protocolario descubrimiento de la placa y después de que por la megafonía sonasen los himnos gallego y español, la afición se lanzó sin rodeos a disfrutar de sus ídolos. Volaron autógrafos y fotografías, especialmente de la nueva sensación deportivista, Nelson Oliveira.
Muchos aficionados se desplazaron luego a la explanada de Riazor, donde la fiesta continuaba al cierre de esta edición. Actuaciones musicales y una gran cena de confraternidad pusieron la guinda a una jornada en la que el Dépor, recién iniciada la Liga, ya se ganó una calle.