El técnico portugués cree que los arbitrajes no están beneficiando a su equipo
25 ene 2013 . Actualizado a las 03:24 h.El portugués Domingos Paciência, entrenador del Deportivo, ha asegurado este jueves que sacar al equipo de los puestos de descenso de la clasificación y lograr la permanencia es el «desafío más duro» que ha asumido en su carrera en los banquillos.
«Cuando vine sabía que era el desafío más duro de mi carrera porque el Deportivo estaba último. Es la primera vez que asumí un riesgo así, aunque no es riesgo, sino un desafío, pero creo que es posible vencerlo», comentó en rueda de prensa.
Su debut con el Deportivo fue positivo ante el Málaga (1-0) y frente a la Real Sociedad (1-1), pero el domingo pasado recibió la primera derrota (2-1) ante el Atlético Osasuna en un partido con polémica arbitral (el primer gol de los navarros en fuera de juego) y poca picardía de sus jugadores en una falta en la frontal del área que les cogió por sorpresa mientras preparaban la barrera.
«Pasaron muchas cosas que no fueron buenas para nosotros y que no salimos beneficiados. Hubo una entrada al pecho de Manuel Pablo en el minuto 32 y ayer vi el Sevilla-Zaragoza y el Valencia-Real Madrid y entradas menos impetuosas fueron roja directa. Todo lo que pasó, hay que olvidarlo», dijo.
Aunque abogó por pasar página a todo lo que pasó en Pamplona, Domingos le dio una vuelta más en su crítica a los arbitrajes, que, a su juicio, no están beneficiando al Deportivo y sí a otros rivales directos.
«Por lo menos, se trata de no salir perjudicados. Ante el Real Madrid, Osasuna encajó un gol que no subió al marcador. Hay que analizar los lances y ver que nosotros no salimos nada beneficiados», declaró.
Además, se mostró «seguro que con un equipo de arriba no pasaba» lo que le sucedió al Deportivo en la falta que supuso el segundo gol de los pamploneses.
En cualquier caso, el técnico confesó su optimismo porque ve a los equipos que «están luchando» con el conjunto coruñés por la permanencia y no cree que «sean mejores» que sus pupilos.
Y eso es lo que intentará demostrar el Deportivo el próximo sábado ante el Valencia, del que destacó la «movilidad» que le caracteriza y que le convierte en un rival «difícil para cualquiera».
«El partido ante el Valencia es lo importante ahora mismo. El equipo debe sentir que puede ganar. Es un partido importante para los dos equipos, más para nosotros en este momento, y tenemos que pensar en lo que hicimos en el último partido de casa (ante el Málaga) y en trabajar bien para poder ganar», declaró.