Los alumnos de Oca no pudieron con Daniel Miller

M Garabantes

DEZA

Unións Agrarias organizó una charla para productores locales de manzana.
Unións Agrarias organizó una charla para productores locales de manzana.

El jugador y el técnico del Obradoiro, Moncho Fernández, visitaron ayer el centro en un acto en el que se reencontró con uno de sus pupilos en el EDM A Estada y actual regidor, José López

09 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

1El colegio estradense de Oca tuvo ayer dos invitados de altura: el entrenador del Obradoiro de baloncesto, Moncho Fernández, y el jugador Daniel Miller. Los alumnos del centro bombardearon a preguntas a uno y a otro. Sin piedad. A Moncho Fernández le preguntaron de dónde viene su sobrenombre, el alquimista de Pontepedriña. El entrenador es de ese barrio compostelano y tiene fama de haber convertido en oro los equipos que ha tenido entre manos. Entre ellos ha estado en el EDM estradense, en el que por aquel entonces jugaba el hoy alcalde estradense, José López, que se reencontró en Oca con su maestro en la cancha. A Miller le hicieron la pregunta inevitable en un niño. Mide 2,11. El jugador se prestó a jugar al básket con los pequeños. De cuatro en cuantro intentaron meterle una canasta. Pero nadie lo consiguió. Al final hubo firma de autógrafos y una bufanda del Obra de regalo para el alumno más rápido en contestar. La pregunta era con qué número juega Miller. Es el 5. Ahora, nadie dudará.

Fin de ciclo en Barcelona

2Un grupo de 25 alumnos de cuarto curso de ESO del IES estradense Antón Losada se encuentran de viaje de fin de ciclo en Barcelona. Además de la ciudad y su acuario visitarán Tarragona, Salou y Port-Aventura.

Visita de alumnos de Figueiroa al consistorio

3Alumnos del CEIP de Figueiroa visitaron ayer el consistorio. Fueron recibidos por el alcalde, con el que conversaron distendidamente. Aprovecharon para pedir porterías para el patio.

Sidra más aromática gracias al abono foliar

4Productores de manzana de la zona asistieron ayer a una charla sobre abonos impartida por Anxo Escariz, técnico de una empresa de biotecnología. La firma produce un abono foliar que, al entrar por la hoja, pulverizado, evita la multiplicación de malas hierbas de los abonos de tierra convencionales. Mejora la resistencia de la planta contra enfermedades y el cuajado de la flor, lo que repercute en una fruta con maduración más homogénea y más compuestos aromáticos, algo muy interesante para la manzana de sidra.