Funcionarios explicaron a Casares que se depositaron en el punto limpio viejos equipos sustituidos los últimos meses, pero guardando el disco duro
27 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Un día después de que el lunes el previsible futuro alcalde de Lalín, Rafael Cuíña, advirtiese de que no se quedaría quieto si el actual gobierno eliminaba papeles, en la mañana de ayer saltaban las alarmas en el consistorio. El motivo: la marcha de numerosos equipos informáticos del ayuntamiento al punto limpio, que generaba un aviso a navegantes del socialista González Casares en Facebook, destinado a trabajadores públicos y cargos políticos. «Destruir ordenadores e documentos é delicto. Calquera indicio poñerémolo en coñecemento da fiscalía e non se descartan denuncias penais. Se queren un cambio tranquilo que deixen as cousas no seu sitio».
El propio Casares se personaba más tarde en el ayuntamiento para realizar distintos trámites, y varios funcionarios le explicaron la situación. Indicaron que se trata de viejos equipos, que han sido sustituido en los últimos meses por una partida de unos 80 nuevos ordenadores. En muchos casos, se trata de máquinas obsoletas ?con algún Pentium 3 y 4? que se guardaron en la segunda planta del consistorio una vez retirados de los puestos de trabajo. Ayer se procedió a bajarlos a un camión que los depositó más tarde en el punto limpio.
Ordenar la segunda planta
Pero fuentes municipales aclaran que todos los datos almacenados en los discos duros habían sido traspasados ya a los nuevos ordenadores; e incluso esos discos fueron extraídos de los aparatos, y están etiquetados y guardados en la casa consistorial. Insisten en que se trata de una actuación que no busca destruir ningún equipo, sino ordenar la segunda planta del castro tecnológico y eliminar los equipos más viejos, puesto que alguno reutilizable se guarda. Aunque desde el ayuntamiento señalan que se están trasladando ordenadores al punto limpio desde el jueves, ante las dudas mostradas por quienes previsiblemente conformarán el nuevo gobierno local se dio orden de paralizar estas actuaciones.
Tras las explicaciones, el socialista González Casares indicaba: «Pódomo crer ou non. É unha actuación que pode levantar suspicacias. E se é certo o que comentan, non estiveron moi hábiles».