Alumnos y profesores del Laxeiro unen sus voces a las de escritores para combatir la violencia de género
17 dic 2015 . Actualizado a las 23:28 h.«Medo ós días/ O seu chegar doía/ Ninguén o vía». Así resumía en un breve haiku, Laura Carelli Cortizo, una alumna del instituto Laxeiro de Lalín la violencia de género y el sentimiento de una mujer maltratada. A este pequeño poema que sigue la forma de este tipo de poema breve de la literatura japonesa se suman muchos más de estudiantes, profesores y de reconocidos escritores.
Todos se unen en una sola voz y dieron forma a una marea que creció en el centro lalinense y que acabó siendo un libro: el Libro do Mal Amor. Un volumen editado por la Xunta que fue presentado por sus protagonistas en un acto presidido por la profesora Gracia Santorum; el director del IES, Uxío Grande; el conselleiro de Educación, Román Rodríguez; y la secretaria de Igualdade, Susana López Abella.
El germen del Libro do Mal Amor fue un taller de poesía en el que Raúl Vacas, que también colabora, habló a los estudiantes de la posibilidad de realizar haikus contra la violencia de género.
Gracia Santórum cuenta que en ese momento supo de su traslado de centro y que ya en el instituto Laxeiro la idea fue cobrando forma. Y a la poesía se sumó la pintura. Mar García y Aránzazu Diñeiro «expresaron en cor o poema que escritores e escritoras mandaban en palabra», explica la profesora en el prólogo de esta publicación.
El resultado de ese trabajo, que unió el esfuerzo de doscientas personas, se plasma en un volumen de 144 páginas de pensamientos y de imágenes que invitan a la reflexión. Que hablan de «Medo nos ollos», de «Bágoas nas meixelas», de «Golpes, desprezo», como expresa Diego Pereiro González. Que dibujan un paisaje de «A Neve branca/ o meu corazón negro/Cando me berras», en palabras de Nerea Ramos Iglesias.
Alumnos y alumnas que reflejan en tres líneas el dolor. Un dolor salpicado de puñaladas, de silencio, de falso perdón y de corazones rotos. De negrones bajo el maquillaje y gritos que rompen la noche. De mujeres escondidas y palabras tristes.
Valentía
Versos que también hablan de valentía, de caer y volverse a levantar, de sacar fuerzas de flaqueza, de quererse a sí mismas, de parar la espiral de violencia. De gritar al cielo un ¡No! rotundo.
Dibujos que colorean de rojo y negro una realidad a la que es necesario poner freno. Flores violetas rotas, cadenas, puñales y lágrimas para un amor que no es ni mucho menos amor.
El trabajo de los alumnos del instituto Laxeiro demuestra el trabajo del centro, de los profesores de los distintos departamentos en la lucha contra la violencia de género pero también nos deja oír, clara y alta, la voz de los jóvenes. Y de su sentir, de su forma de vivir el amor dependerá el futuro. Un futuro en el que todos queremos dejar de conjugar ese verbo, el del mal amar, y poner fin a las muertes por violencia de género que todos los días ocurren. Y ayer no fue una excepción como explicaba Uxío Grande en su intervención.
El acto se inició con un baile de Máisquedanza con alumnos. El conselleiro de Educación y la secretaria de Igualdade subrayaron la iniciativa, enmarcada dentro del Plan Proxecta de Innovación Educativa, en la línea Por 365 días de respecto e igualdade. Román Rodríguez abogó por trabajar en la prevención de la violencia de género. Destacó que Galicia fue la primera comunidad en poner en marcha un protocolo de acoso escolar y ciberacoso que forma parte ya de una hoja de ruta común y transversal que pretende mejorar el buen clima de convivencia en las aulas.
Resaltó el cuestionario realizado para testar el clima de convivencia actual. Conselleiro y secretaria xeral apuntaron que la Xunta está trabajando en la elaboración de una nueva materia de libre configuración en este campo, un plan gallego de igualdad en el ámbito educativo. Unas medidas a las que se añade el análisis de la implantación de un nuevo ciclo formativo de grado superior relacionado con esa temática. Acto asistieron también los escritores Chus Pato y Carlos Negro que colaboraron.
La publicación recoge una selección de 152 trabajos en los que participan alumnos, profesores del instituto lalinense y colaboradores externos
En el volumen se recogen los versos de 42 colaboradores. Entre ellos Chus Pato, Carlos Negro, Celso Fernández Sanmartín o Rosa Aneiros