El Obispado censuró el vídeo de Enrique Iglesias, rodado sin su permiso. El alcalde le recuerda que «o mosteiro se non o conserva o Concello non o conserva ninguén»
01 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«Non se poden tomar decisións cando interesa, e cando non deixarllas a outros». Con respeto, pero así de claro se mostró el alcalde de Silleda, el socialista Manuel Cuíña, sobre las quejas del Obispado de Lugo en relación al vídeo de Enrique Iglesias, rodado en el monasterio de Carboeiro sin pedir consentimiento a la Iglesia.
Y es que fuentes del Obispado habían manifestado su malestar no solo con el contenido del polémico vídeo de Enrique Iglesias para el tema Noche y de día, -en el que aparecen chicos y chicas muy ligeros de ropa y con alguna que otra escena de sexo no muy explícita- sino con la forma, ya que nadie les pidió permiso para rodar el videoclip pese a que el monasterio de San Lourenzo de Carboeiro pertenece a la Iglesia.
El alcalde de Silleda respondió ayer a esta queja recordando que este monasterio lleva 25 o 30 años gestionado y financiado por el Concello. Es el Ayuntamiento quien paga al funcionario que durante todo el año permanece en el monumento religioso, y a los dos que lo hacen en verano, ya que en los meses de mayor afluencia se suma un guía turístico. Manuel Cuíña insiste en que es el Concello quien mantiene el monasterio y vigila que se conserve en buen estado. Cierto es que las obras de rehabilitación que se hicieron hace unos años fueron financiadas por la Consellería de Cultura, ya que forma parte del patrimonio, pero recuerda Cuíña que «o mosteiro se non o conserva o Concello non o conserva ninguén».
Este mantenimiento es el que ayudó a que en el año 2014 entraran a visitarlo 17.000 personas, una cifra que se suma a todos aquellos que se acercan por la zona pero finalmente deciden no entrar.
Un euro por acceder
Desde hace un tiempo el acceso cuesta un euro, pero antes ni siquiera era necesario pagar por visitarlo. En su momento la Iglesia -sostiene el regidor- participó en el plan director del monasterio, pero actualmente no aporta nada. Cuíña apunta que en el interior del Carboeiro se rodaron muchas otras grabaciones sin que hubiese ningún problema, «houbo gravacións modestas de grupos de cámara e outras máis ambiciosas», pero parece que la polémica ha saltado en este caso aunque el alcalde tiene claro por qué: «A polémica non ven por onde se gravou, veu porque a Xunta pagou máis de 300.000 euros, non por isto».
A los 302.000 euros que le costó a todos los gallegos el nuevo videoclip de Enrique Iglesias se sumaron las críticas al ver el resultado, ya que de los cuatro minutos y medio que dura solo aparecen tomas exteriores de paisajes y monumentos de la comunidad en 45, y además la mayoría son al principio o al final y sin música de fondo. Con esta última polémica entre Concello de Silleda y Obispado de Lugo se echa más leña al fuego en un vídeo ya de por sí bastante calentito.