Montoro sitúa en la cúpula de la investigación del fraude a Pilar Valiente, que dimitió de la CNMV por el caso Gescartera
02 mar 2012 . Actualizado a las 10:29 h.«Si combatir el fraude ha sido siempre un objetivo prioritario, en estos momentos resulta esencial». Esencial para nutrir las famélicas arcas públicas y contribuir a aligerar la losa del déficit, y esa es la declaración de intenciones con la que la Agencia Tributaria ha diseñado el Plan de Control Tributario y Aduanero para este año, es decir, el que marcará la lucha contra el fraude fiscal. Hacienda espera recaudar 8.171 millones de euros, un 8 % más que el objetivo del 2011, ejercicio que, pese a la crisis, resultó muy productivo para el fisco, pues ingresó 10.400 millones de euros.
Bajo el foco de la inspección estarán -según se recoge en las directrices del plan, publicadas ayer en el BOE- «profesionales, deportistas y artistas», ya que Hacienda perseguirá los potenciales usos indebidos de sociedades creadas para ocultar ingresos o para deducir indebidamente gastos particulares.
Tanto el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, como la directora general de la Agencia Tributaria (AEAT), Beatriz Viana, subrayaron en un encuentro con los medios la importancia de esta línea de actuación, ya que se trata de luchar «contra el fraude que genera alarma social». Está previsto realizar 1.436 inspecciones sobre el citado colectivo de profesionales, lo que se traduce en un 14 % más que el pasado año.
Pero el cerco al defraudador va más allá, pues la AEAT perseguirá también el empleo de facturas falsas, la importación y venta minorista de productos desde Asia y el contrabando de tabaco, dado su espectacular crecimiento, lo que ha hecho que, pese a incrementarse la fiscalidad sobre el tabaco no se haya trasladado a una mayor recaudación.
La lucha contra la economía sumergida será otro de los frentes. A través del cruce de datos de más de 35 millones de contratos de electricidad con las bases del catastro, se controlarán los arrendamientos de viviendas y negocios no declarados en busca de actividad irregular.
Destituciones
El ministerio confirmó ayer la destitución de cinco jefes de inspección de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), al frente de la que ha colocado -como directora adjunta, es decir, número dos- a Pilar Valiente, que tuvo que dimitir como presidenta de la CNMV en el 2001 por el caso Gescartera. Los inspectores destituidos eran los responsables de investigar casos como la trama Gürtel o el caso Urdangarin.
Cobrar la deuda. El fisco usará todas las vías para asegurarse el cobro, incluso pedir prisión para quien no pague sin ser insolvente
Fundaciones y entramados societarios. Cualquier fórmula concebida para desviar rentas se someterá a especial vigilancia