Alega que los datos que Novagalicia Banco dio al cliente eran insuficientes
17 ene 2013 . Actualizado a las 15:07 h.El Juzgado de Cambados ha dado la razón a un afectado por las preferentes y ha anulado el contrato que en su día firmó con Novagalicia Banco. Según explica la abogada Ana Villalustre, encargada de defender el caso, el juez ha tenido en cuenta que la información que en su día ofrecieron a su cliente era insuficiente y por ello considera que el contrato está viciado. La entidad bancaria deberá ahora abonar todo el dinero al afectado, aunque también dispone de un plazo de veinte días para recurrir la sentencia. La abogada no ha querido desvelar ni la cuantía del desembolso que deberá afrontar el banco, ni la identidad de su cliente.
Poco más de seis meses ha tardado el juzgado cambadés en dictar sentencia en este caso de preferentes. La media, explica Villalustre, suele estar en torno a los diez o doce meses, dependiendo de la sala. La vía judicial ha resultado, en este caso, ser más rápida que el arbitraje.
Los argumentos presentados por su cliente, añade Villalustre, serían válidos para muchos de los que han perdido su dinero por las preferentes. «Los productos bancarios son muy complejos y las entidades están obligadas a dar información muy detallada», afirma. Pero esto no ha sucedido así. En el caso de las preferentes, «la información que se daba no era toda la que había y tampoco se les decía todo lo que había que decirles», puntualiza. Las entidades solo facilitaron información parcial, «lo que ha llevado a la gente a engaño. Igual si supieran que eran acciones que no vencían pues no habrían firmado estos contratos», argumenta.
Esta falta de información es el motivo por el cual el juez ha decidido anular el contrato que en su día firmó el afectado con Novagalicia Banco. Considera que este carecía de todos los datos necesarios para poder valorar adecuadamente el producto que estaba comprando. «Si los tuviera, a lo mejor no firmaba», añade Villalustre. El contrato está viciado, concluye el juez, y por ello debe ser declarado nulo.
La abogada explica que, aunque la mayoría de los afectados se han decantado por el arbitraje, en su bufete llevan varios casos de estas características. «En general la mayoría esperan al arbitraje, porque era la solución más rápida. Pero ahora se está ralentizando mucho», concluye.