Discrepa de la opinión española de que Nuakchot está abierto a su regreso
10 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Que si hay pulpo, que si no hay pulpo, que si hay el justo sin la flota europea, que se alcanzará la explotación plena si regresan los gallegos, que si se necesitan campañas para estimar la abundancia... Todos condicionales y, según la flota cefalopodera, un certeza que nadie puede negar: la «escandalosa infrautilización» del acuerdo pesquero suscrito entre la Unión Europea (UE) y Mauritania, un pacto que ha dejado al margen a 24 barcos de capital gallego (tres ya desguazados) por el que se pagan 70 millones de euros y solo se emplean un 15 % de sus posibilidades, como recordó ayer José Ramón Fontán, gerente de la Asociación Nacional de Armadores Cefalopoderos (Anacef).
Su presidente, Francisco Freire, fue más allá. Pidió a Agricultura la denuncia del protocolo por caro e inútil: «Mauritania tiene todo el derecho de reservar su pulpo para su flota, nadie se lo discute, pero lo que no se entiende es por qué la UE negocia un acuerdo tan caro con condiciones inasumibles».
Y es que en julio pasado, Damanaki, bajo su responsabilidad, dio el visto bueno a un protocolo sin posibilidades de pulpo para la flota cefalopodera, que confinaba a los buques marisqueros a operar en una zona en la que no hay marisco y a los pelágicos en un área en la que no hay sardina, y que elevaba hasta en un 300 % los cánones que debían abonar los armadores, por lo que solo lo han aprovechado los atuneros, dos merluceros gallegos y un puñado que no llega a un tercio de los arrastreros pelágicos.
Solo había un párrafo bueno en el protocolo: la cláusula que prevé la denuncia del pacto si se constata un bajo nivel de utilización de las posibilidades de pesca.
Ese es, a juicio de los armadores, el camino más corto para regresar a Mauritania. Porque las conclusiones del comité científico celebrado la pasada semana en Rennes «no nos valen», más que nada porque «dan por buenos los datos de Mauritania, datos desfasados y obtenidos a través de técnicas oceanográficas anticuadas», subraya Fontán.
La visión optimista de Madrid
Es más que evidente que los armadores fueron del todo inmunes a las altas dosis de optimismo que rezumaron el IEO y las autoridades pesqueras en la reunión para explicar el resultado de la cumbre de científicos. A España no le cabe duda de que Mauritania ha dejado la puerta abierta a la explotación del pulpo. Agricultura dice que el comité confirma que se ha reducido el esfuerzo pesquero desde el 2002 y que en el 2011 y en el 2012 ha habido un alza significativa de las capturas. Ahora bien, los mauritanos sostienen que la mortalidad por pesca es ahora la justa para alcanzar el rendimiento máximo sostenible, pero, claro, ahora que no están los europeos en el caladero. En definitiva, que puede haber excedente de pulpo, pero antes habrá que probar ese modelo de gestión de vedas espacio-temporales planteado por el IEO y hacer campañas para estimar la abundancia de pulpo... Total, más tiempo de agonía para una flota en una situación «que pende de un hilo».