El Juzgado de Primera Instancia número 4 de Santiago ha condenado a Novagalicia Banco a devolver 111.736 euros a una compostelana que suscribió participaciones preferentes. Es una de las mayores cantidades hasta la fecha.
La sentencia, además, es novedosa porque estima indiferente que la cliente, Pilar Álvarez-Santullano, fuese quien entre el 2005 y el 2009 diese varias órdenes de suscripción de las preferentes, así como que en algunas ocasiones estuviese incluso acompañada por su asesor fiscal.
Según el abogado de la demandante, Ulises Bértolo, NCG no acreditó haber informado debidamente del riesgo del producto, a pesar de que constase en la información entregada. La sentencia considera que no estaba redactado claramente y que la perjudicada las suscribió «confiando en su banco de toda la vida», explica.