El Fondo de Garantía se quedará sin recursos tras pagar las preferentes

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN

ECONOMÍA

Abonará de golpe, el 19 de julio, más de 1.500 millones, cuando su patrimonio solo es de 562

16 jun 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

La solución articulada por el Ministerio de Economía para compensar, en parte, a un número importante de los titulares de preferentes y de deuda subordinada de NCG, y también de Catalunya Banc, tendrá consecuencias sobre el fondo de garantía de depósitos (FGD). Es esa hucha común de la banca que sirve para proteger las cuentas de los clientes en caso de que quiebre una determinada entidad. Ese fondo tendrá que poner, de sus propios recursos, unos 1.500 millones de euros, y de una sola tacada. En un solo día: el 19 de julio. Con ese dinero recomprará a los clientes afectados las acciones en las que se convertirán sus preferentes y subordinadas. De tal forma que podrán recuperar, al fin, parte (que no todo) de sus ahorros.

Si no actuara este fondo, los preferentistas de NCG y de Catalunya Banc que se queden sin arbitraje perderían una parte de su dinero (la quita) y además el resto se convertirá en acciones que, al no cotizar esos bancos, no se pueden vender. Es decir, el dinero estaría atrapado. Por eso es importante.

El problema radica en el impacto que esa operativa tendrá para el propio fondo de garantía (FGD). Según el informe económico que acaba de presentar este organismo, sus posibilidades económicas son bastante reducidas. Hay que recordar que este organismo ?controlado por el Banco de España y las propias entidades? se nutre con las aportaciones que le hace la propia banca de forma regular. Y acabó el 2012 con un déficit de 1.247 millones de euros, consecuencia de pagar buena parte de la reestructuración de la CAM y de Unnim, que tienen un blindaje ante pérdidas que cubre el FGD. Ese agujero quedó posteriormente compensado. El pasado 28 de febrero la banca hizo su aportación anual, de 1.575 millones; y otra extraordinaria (de una derrama aprobada en el 2012) de otros 234 millones, y se cubrió el agujero.

Total, que sus recursos disponibles están ahora limitados a 562 millones. ¿Llega para pagar las preferentes? No. Solo en el caso de NCG, el banco calcula que el fondo tendrá que poner entre 800 y 850 millones. En Catalunya Banc ni siquiera hay estimaciones, pero teniendo en cuenta su cartera no deberían ser menos de 700. Es decir, 1.500 cuando solo hay 562. Pero como el pago a los preferentistas está garantizado por una resolución oficial, al FGD no le quedará otra que volver a una situación de déficit.

Pendientes de otra derrama

¿Cuándo se corregirán esos números rojos? En enero del 2014. Entonces toda la banca tendrá que hacer otra aportación extraordinaria que sumará 800 millones de euros, precisamente para compensar las preferentes de NCG y de Catalunya Banc. Esto ya ha provocado resquemores entre las entidades, que no entienden por qué se castiga a todos por los errores de unos pocos. El Gobierno, además, fijó unos criterios para esa derrama que perjudican al BBVA, porque bonifica a las entidades que están presentes en la Sareb (el banco malo), que no es el caso del gigante azul.