Renovables heridas de muerte

f. fernández REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

El Gobierno ha cerrado el grifo al sector eléctrico, sobre todo a las energías limpias, lo que coloca el concurso eólico de la Xunta en la uvi

17 feb 2014 . Actualizado a las 07:03 h.

Tras dos años de batallas, están heridas de muerte. Las energías renovables son el blanco de las iras del Ministerio de Industria, que ha consumado una reforma energética que parece haberle cortado la cabeza al sector de las energías verdes. Todo se resume en dos palabras: menos dinero, por los recortes a las retribuciones que percibían eólica, hidráulica y solar por los megavatios producidos.

En Galicia, preocupa especialmente el negocio del viento y el concurso eólico que la Xunta trata de reanimar a marchas forzadas. Pero, pese a todos sus esfuerzos por allanar el camino a los promotores, parece que estos tirarán la toalla y solo un milagro conseguirá que se vuelvan a construir parques. La retribución que sustituye a las primas garantiza una «rentabilidad razonable» que el Gobierno ha fijado en el 7,5 % anual, que, según fuentes del sector, recorta entre un 30 y un 40 % el rendimiento de una instalación. Una ruina.

La Xunta se resiste a asumir el fin del concurso y acaba de autorizar los tres primeros parques, y su intención es aprobar varias decenas más a lo largo del año. Pero una cosa es autorizarlos y otra que se construyan, insisten en el sector. Según la Consellería de Industria, de los 2.100 megavatios eólicos adjudicados en el 2010, están aprobados 60, y 500 más han superado ya el farragoso trámite de la declaración de impacto ambiental y están a punto de caramelo.

La Xunta sostiene que el concurso ha generado 700 empleos.