
Deloitte detecta un mayor deterioro en las cuentas de los años 2011 y 2012
24 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Parecía imposible hace poco más de un mes, pero Pescanova está ya fuera del concurso de acreedores, al mismo tiempo que su filial Pescafina, cuya salida estaba condicionada a la de la matriz.
La sentencia, hecha pública ayer, devuelve al consejo de administración, provisionalmente descabezado tras la dimisión de Juan Manuel Urgoiti de la presidencia, plenas facultades ejecutivas y de representación durante el período de transición que se abre a partir de ahora. Será un tiempo muy limitado, ya que se disolverá en la junta general de accionistas, que se celebrará la última semana de junio, de la que saldrá la refundada Nueva Pescanova.
Concurso sin responsables
El fallo judicial de Roberto de la Cruz, magistrado del Juzgado Mercantil 1 de Pontevedra, decreta también el cese de Deloitte como administrador concursal, función que ha estado desempeñando durante los últimos 13 meses (Pescanova entró en concurso en abril del 2013); además de la aprobación del convenio de acreedores que convierte a los bancos con mayor deuda en la compañía (Sabadell, Popular, NCG, Caixabank, Bankia, BBVA y UBI), en los dueños de Nueva Pescanova.
Fuentes judiciales han llamado la atención sobre el hecho de que la sentencia descarta la apertura de un proceso de calificación del concurso (en términos jurídicos, la formación de la sección sexta), para determinar si hay culpables de la situación que llevó a Pescanova a la suspensión de pagos o si, por el contrario, se trata de un proceso fortuito.
La compañía se acogió a la ley concursal bajo la presidencia de Manuel Fernández de Sousa ahogada por deuda que por entonces alcanzaba los 3.600 millones y que ha ido a más. Así lo han demostrado las cuentas reformuladas por el administrador concursal Deloitte, correspondientes a los ejercicios 2011, 2012 y 2013, que fueron llevadas al consejo de administración de este pasado jueves, para su aprobación definitiva en la próxima junta de accionistas.
Cuentas reformuladas
El informe concursal que elaboró Deloitte en septiembre del 2013 cifró en 1.667 millones el agujero patrimonial de la compañía. Esta cifra, ahora revisada, habría sufrido un apreciable incremento.
Una vez levantado el concurso, ¿qué ocurrirá en las próximas semanas? Por primera vez, desde que comenzó la crisis de la compañía, Pescanova explicó sus planes en un comunicado que también remitió a la CNMV. Con carácter inmediato, el consejo pondrá en marcha la reestructuración de la mayor parte de las filiales españolas del grupo, «tanto en el plano financiero como societario». La intención de los bancos es sanear las empresas vinculadas a la matriz, bien mediante concursos exprés o bien refinanciándolas, en los casos que sea posible.
También de forma inmediata quedará constituida la comisión de vigilancia del convenio, que estará formada por representantes de los principales acreedores del grupo, es decir, los bancos, la propia Pescanova y la administración concursal, y desempeñará «un papel esencial» en el proceso de transición hasta que Nueva Pescanova esté constituida y plenamente operativa. Los nombres que conformarán esa comisión son Senén Touza, por Deloitte; Alejandro Legarda, por Pescanova; y, probablemente, González-Robatto, por la banca.¡