Campofrío prepara un ERE en la planta calcinada

J. A. B. Madrid / Colpisa

ECONOMÍA

El incendio, aunque controlado, seguía ayer activo.
El incendio, aunque controlado, seguía ayer activo. César Manso < / span>AFp< / span>

La compañía se compromete a abrir otra planta en el 2016 en los mismos terrenos

18 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Campofrío trata de rediseñar su estrategia de futuro una vez comprobado que su principal fábrica en España, situada en las proximidades de Burgos, ha quedado prácticamente calcinada por un incendio accidental que comenzó a primera hora del domingo y que no se espera que quede extinguido hasta hoy o incluso mañana. Lo que sí se da por seguro es que construirá una nueva planta en los mismos terrenos, aunque no está clara aún la fecha de apertura, ni tampoco qué plantilla tendría.

Según el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, el propio presidente de la multinacional cárnica, Pedro Ballvé, le comunicó que su intención es tenerla abierta en el 2016. En una rueda de prensa posterior, sin embargo, directivos de Campofrío evitaron concretar una fecha y se limitaron a señalar que será «tan pronto como sea posible». La inversión prevista sería de 170 millones de euros, acorde con lo que costó en su día levantar la fábrica destruida.

De momento, la compañía ha empezado a recolocar a parte de los 867 empleados que tenía su planta de La Bureba. Aunque sin precisar tampoco aquí cifra alguna, sus responsables señalaron que el personal administrativo, logístico y de recursos humanos ya ha sido trasladado a otras dos instalaciones que tiene en la provincia: la filial Carnes Selectas y un almacén de productos terminados.

La mayoría de la plantilla, sin embargo, será incluida en un expediente de regulación de empleo suspensivo por causa de fuerza mayor, que a los empleados les permite mantener temporalmente su puesto aunque tendrán que ir al paro hasta que vuelvan a trabajar. La empresa, por su parte, puede deducirse el 50 % de las cuotas sociales mientras los contratos estén suspendidos.

Sin garantía al 100 %

El problema es que la empresa no tiene claro aún si finalmente terminará contando con todos ellos. Su director general, Fernando Valdés, afirmó que aún es «prematuro» afirmar si se mantendrá o no el 100 % de la plantilla, aunque sí recuperará en unos dos años las 60.000 toneladas de producción que salían anualmente de su planta burgalesa. Mientras, paliará el problema aumentando la carga de trabajo de sus otras cinco fábricas españolas y recurriendo, si es necesario, a los otros 29 centros que la compañía tiene en Europa.