Mariano Rajoy: «Yo a los treinta años probablemente habría sido un pésimo presidente del Gobierno»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ELECCIONES 2016

David Mudarra

«El PP es el único partido que está claro que no va a pactar con Podemos», advierte el líder popular

18 jun 2016 . Actualizado a las 10:31 h.

Superado el ecuador de la campaña, Mariano Rajoy insiste en plantear la disyuntiva de escoger entre su continuidad o la llegada al Gobierno del «populismo de extrema izquierda» que, a su juicio, «sería la peor opción». Dice entender que haya gente «indignada y defraudada» con los partidos clásicos, algo que achaca a «la crisis», pero afirma que Podemos «nos volvería a meter de cabeza en lo peor de la recesión». «Los populismos, de extrema izquierda o de extrema derecha, acaban siendo letales para el bienestar de la gente», explica.

-Propone usted que se deje gobernar al más votado. ¿Dejará entonces gobernar a Pablo Iglesias si es el más votado?

-Creo que lo peor que le podría pasar a España sería tener un Gobierno presidido por el señor Iglesias. Nunca le vamos a dar nuestro apoyo por activa o pasiva y todo el mundo lo puede entender con facilidad. No solo por sus propuestas de política económica, que van directamente contra la recuperación que está en marcha -y a lo que está pasando en Grecia me remito-, sino también porque plantean una demolición del sistema político que nos dimos en la transición y que ha traído a los españoles la mayor etapa de bienestar y libertades que hemos tenido nunca.

-¿En ese caso propondría al PSOE la gran coalición para impedir que gobierne Unidos Podemos?

-Yo ya he planteado la gran coalición, con el PSOE y también con Ciudadanos, habiendo ganado yo las elecciones, porque el reparto de apoyos que decidieron los españoles con sus votos en diciembre así lo aconsejaba. Es cierto que ese tipo de acuerdo nunca se ha dado en España hasta ahora, pero es muy común en Europa. Ya se sabe que el señor Sánchez no quiso ni estudiar mi propuesta. Y así estamos, repitiendo las elecciones porque Sánchez vetó al PP y no consiguió formar un Gobierno alternativo. Yo creo que después del 26 de junio van a tener que cambiar algunas actitudes.

Ed Carosía

-Visto el resultado del debate electoral a cuatro, ¿se arrepiente de no haberlo aceptado en la anterior campaña?

-No. En aquel momento lo lógico era mantener la tradición del debate a dos, y ahora lo más lógico parecía lo que se ha hecho. No tiene mayor trascendencia.

-Albert Rivera insiste en que usted está incapacitado para gobernar, pero está dispuesto a pactar con otros líderes del PP.

-El señor Rivera me ataca porque me negué a apoyar a su candidato, que era el señor Sánchez. Esa es la única razón; él decidió pactar con Sánchez un programa de gobierno abrumadoramente socialista y él decidió apoyar a Sánchez en aquella investidura fracasada. Como no le salió bien, empezó a atacarme a mí y en eso sigue. Pero, como comprenderá, a estas alturas de mi vida política no me voy a alterar por lo que diga de mí el señor Rivera.

-¿Que usted sea el presidente del Gobierno es condición sine qua non para cualquier pacto?

-Me parece que estamos ante un planteamiento poco lógico, por no decir algo peor. Yo no conozco que en ningún país democrático y normal se plantee para articular un pacto de Gobierno o una coalición que se vaya precisamente quien ha sido más votado por los ciudadanos. ¿Para qué pedimos entonces a la gente que vote? ¿Para decirles al día siguiente que lo que han votado no sirve para nada?

-¿Qué teléfono marcará primero tras el 26J para tratar de pactar un Gobierno, el de Albert Rivera o el de Pedro Sánchez?

-No lo sé, habrá que esperar a los resultados, pero en diciembre al primero que llamé fue a Pedro Sánchez. Los votos de Rivera no llegaban para formar una mayoría, los de Sánchez sí, por eso le llamé primero y le ofrecí el pacto al él. Sin él no era posible construir un Gobierno estable.

-¿Es viable que usted gobierne en solitario con un resultado cercano a los 130 diputados?

-Es muy difícil, pero sobre todo es malo para el país, por eso mi planteamiento en diciembre fue el de la gran coalición. Creo que no nos podemos instalar en la incertidumbre permanente. Fíjese lo que está pasando en tantos ayuntamientos que aún no tienen presupuestos. Esas cosas acaban haciendo daño y pasando factura. Por eso yo creo que se necesita un apoyo parlamentario claro que dé estabilidad al Gobierno y permita hacer cosas.

-¿Cree que sería mejor para España que el PSOE quedara por delante de Unidos Podemos?

- Yo creo que lo mejor para España es que el PP tenga un apoyo mucho más rotundo. Eso es lo mejor, lo que más ayudaría a despejar las incertidumbres. El PP es el único que está claro que no va a pactar con Podemos.

-Usted defiende la experiencia en política. ¿Su sucesor en el PP debe ser una persona experta y veterana o alguien de la generación de entre 30 y 40 años?

-La experiencia es muy importante para gobernar. La experiencia te enseña a fijar bien las prioridades, a escoger los momentos, a resistir las presiones, a mantener el rumbo cuando es más difícil, a tener templanza? Yo a los 30 años probablemente hubiera sido un pésimo presidente de Gobierno. Eso vale para la política y para todos los órdenes de la vida. Una empresa no contrata a un becario como director general, contrata a alguien con una trayectoria y unos resultados. Lo bueno que tiene el PP es que tiene gente de todo tipo y condición: gente con mucha experiencia y gente muy joven con mucho empuje y muchas ganas de cambiar las cosas. Y necesitamos a unos y a otros.

-¿Es lógico que el presidente de Estados Unidos visite España el 9 de julio, cuando no habrá Gobierno ni Parlamento?

-Es una buena noticia que venga Barack Obama. He coincidido con él en alguna ocasión y siempre me mostraba su interés por venir. Celebro que venga, creo que es un gesto que normaliza nuestras relaciones diplomáticas. No veo que nadie se pueda sentir molesto por su presencia en España, todo lo contrario.

-¿Podría influir esa visita en los pactos poselectorales?

-Ni puede ni debe. El Gobierno de España lo deciden los españoles.

-Considera que el PP ha pagado ya todo el precio político por sus casos de corrupción?

-Creo que los españoles han hecho una valoración global de nuestro comportamiento. Han tenido en cuenta lo que hemos hecho mal, los casos de corrupción que hemos tenido, pero también en lo que hemos acertado y, a la vista de los resultados, creo que la valoración que hacen es, en términos generales, positiva.

-¿Por qué no se querella usted contra quienes le acusan directamente, incluso durante el debate electoral, de haber cobrado sobres con dinero negro?

-Por la misma razón por la que no me he querellado contra el joven que me pegó un puñetazo en Pontevedra. Porque no conduce a nada.

-¿Sería más fácil llegar a un acuerdo con otro dirigente del PSOE como Susana Díaz si Pedro Sánchez dimitiera tras un posible sorpasso de Podemos?

-Las cuestiones personales, sin duda influyen en la política, pero yo siempre he intentado tener una relación cordial y respetuosa con los tres secretarios generales socialistas con los que he tratado. Yo no me meto en las cuitas internas de otros partidos, para eso soy muy respetuoso.

«Podemos bajar los impuestos en la medida en que se mantenga el ritmo de crecimiento»

Mariano Rajoy considera compatible bajar los impuestos, reducir el déficit y no hacer recortes.

-¿Bajará los impuestos incluso aunque sus previsiones de crecimiento no se cumplan?

-Precisamente propongo volver a bajar los impuestos para ayudar a que la economía siga creciendo. Creo que podemos bajar los impuestos en la medida en que se mantenga este ritmo de crecimiento económico. El año pasado lo hicimos: bajamos los impuestos dos veces, la economía española fue la que más creció entre los países grandes de Europa, y creamos muchos puestos de trabajo. Y además, aunque a algunos se le olvide, bajamos el déficit en casi un punto.

-¿Tienen que pagar más impuestos los ricos o es conveniente que los ricos y empresarios paguen menos para que generen más empleo?

-Lo más útil y lo más efectivo es que mucha más gente pague menos impuestos, es decir, ensanchar las bases, en vez de subir los tipos. Eso se consigue con empleo, con crecimiento económico, con actividad, con consumo? en definitiva con una economía sana.

-Dice usted que no recortará nada en materia de protección social. ¿De dónde saldrán los 8.000 millones de recorte que exige Bruselas?

-Ya hemos adoptado medidas en el presupuesto de este año para reducir 2.000 millones de gasto de la Administración General del Estado y sin tocar ninguna partida social; también hemos exigido a las comunidades que se desviaron de sus objetivos que hagan lo propio. Por cierto, me gustaría subrayar que Galicia ha tenido un comportamiento ejemplar en esta cuestión. Es la diferencia entre los políticos que saben gestionar y los que solo hacen discursos.

«La acción combinada de Gobiernos del PP en Madrid y Galicia fue positiva»

Cuando al líder del PP se le pregunta si los pactos a los que él llegue en Madrid pueden condicionar los que se alcancen luego en Galicia, responde que «eso dependerá de la voluntad de unos y otros de llegar a acuerdos».

-¿Sería posible también una gran coalición en Galicia con el PSdeG si Núñez Feijoo no alcanza la mayoría absoluta?

-No veo por qué no ha de ser bueno para Galicia lo que es bueno para el resto de España. Pero no creo que sea necesario, porque Alberto va a tener un magnífico resultado.

-Si Ciudadanos consuma su pacto con el PSOE y ambos acaban gobernando en Madrid, ¿podría pactar Feijoo con el partido de Albert Rivera en Galicia?

-Es altamente improbable que el pacto entre PSOE y Ciudadanos les permita llegar al Gobierno; a partir de ahí le diré que con vetos no se va a ningún lado y se dañan los intereses de la gente.

-El año 2018 está cada vez más cerca. ¿Puede comprometerse a que ocurra lo que ocurra se cumplirá el plazo para que la puesta en marcha del AVE a Galicia se produzca ese año?

-Con la programación actual, el AVE llegará a Ourense en el 2018. Ese es mi compromiso y los gallegos saben que lo cumplimos porque en los momentos de absoluta emergencia económica mantuvimos el esfuerzo en la construcción del AVE a Galicia como una inversión prioritaria. A otros no les gusta el AVE, a nosotros sí.

-Hay gallegos que esperaban que con un presidente gallego en la Moncloa a la comunidad le iba a ir mejor de lo que le ha ido y se sienten decepcionados. ¿Le irá mejor a Galicia en la próxima legislatura que en la actual?

-Algunas personas estarán decepcionadas, pero creo que no tienen motivos. La acción combinada de Gobiernos del PP en Madrid y en Galicia ha sido indudablemente positiva. Galicia tiene sus cuentas en orden y menos desempleo que en la media nacional. En estos años, el Estado ha invertido en infraestructuras en Galicia 5.600 millones de euros, y en el 2016 otros 1.300. Hemos acabado la autovía del Cantábrico, la tercera Ronda de Coruña, el nuevo acceso al puerto exterior; pusimos en servicio el eje atlántico de ferrocarril entre A Coruña y Vigo, que acumula dos millones y medio de viajeros; hemos dotado de carga de trabajo a los astilleros de Ferrol y Vigo. Sin duda quedarán cosas por hacer, pero nadie podrá decir que no hemos hecho cosas aquí.

-¿Qué opinión le merece el nuevo candidato del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga?

-No le conozco todavía.

-¿Cómo valora la gestión de los ayuntamientos gallegos regidos por alcaldes de las mareas?

-Muy similar a lo que ocurre en otros lugares de España donde los socialistas decidieron dar su apoyo a Podemos para evitar los gobiernos del PP. Son gobiernos inestables, que en muchos casos no consiguen ni hacer los presupuestos y que poco a poco paralizan los proyectos municipales. Parte de los problemas que hoy tiene el PSOE en toda España tienen su origen en esos acuerdos contra el vencedor de las elecciones.

-¿Le ha faltado sensibilidad al PP para explicarse ante los que más han padecido la crisis?

-Es cierto que a veces puede parecer que damos muchas cifras y hacemos poca literatura, pero es que detrás de las cifras hay personas. Si cuadramos las cifras, a las personas les va bien, si no, a las personas les va muy mal. ¿De qué sirve presumir de ser el campeón de las buenas intenciones si tus errores de gestión mandan al paro a tres millones de personas, o si acabas congelando las pensiones? La política social, la atención a las personas, las pensiones, la calidad de la sanidad y la educación ? todo sale del mismo sitio, de una buena política económica que cree empleo. Se podrá decir mejor o peor, pero es lo que hay.

-¿Está preparado el PP para una sucesión ordenada en el caso de que los pactos entre otros partidos le impidan a usted presidir el Gobierno?

-El Partido Popular ha sido siempre un partido serio y ordenado, que se ha sabido renovar constantemente y que va a seguir gobernando Galicia y España, estoy convencido.

-Después de tres campañas tan duras, ¿sería esta su última legislatura como presidente?

-A mí me gustan las campañas electorales. Las disfruto mucho, sobre todo cuando al final ganas las elecciones. Yo espero que esta sea una de esas. Creo que ganaremos y que gobernaremos. Lo otro, no me lo he planteado.

-¿Qué errores cometidos en la anterior campaña electoral ha corregido usted en esta?

-Pues le voy a decir una cosa, yo creo que hicimos una buena campaña en diciembre, le recuerdo que ganamos con claridad, y creo que ahora estamos haciendo una buena campaña. Tenemos algo que el resto de partidos no tienen, una organización muy grande que está presente en todo el territorio nacional? salir en televisión está muy bien, y yo lo he hecho todo lo que he podido, pero también tener en cualquier aldea de Galicia y en cualquier pueblo de España un militante que da la cara por el partido. Eso solo lo puede hacer el PP.