Aguirre dice que solo reprocha a Rajoy que no recorte más

a. m. / r. c. madrid / colpisa

ESPAÑA

Pérez Rubalcaba acusa al presidente de estar huido del Parlamento y de haber entrado en una deriva autoritaria

01 may 2012 . Actualizado a las 06:58 h.

Esperanza Aguirre respalda sin fisuras la senda de cambios estructurales que ha tomado Mariano Rajoy desde que llegó a la Moncloa. Es más, la presidenta de la Comunidad de Madrid solo pone una pega: «No se reforma lo suficiente y las reformas van algo lentas». La reelegida presidenta del PP regional -el pasado fin de semana, con el 97,2% de los votos- consideró adecuada la gestión de Rajoy, pero echó en falta más ambición y más rapidez en las medidas que ha adoptado el Ejecutivo, según señaló en una entrevista radiofónica. Estimó asimismo Aguirre que la ley de estabilidad supondrá un ahorro inmediato de unos 3.000 millones, cantidad que también considera insuficiente. Aguirre arremetió asimismo contra los dirigentes del PSOE por presentarse como «moralmente superiores cuando han dejado más de cinco millones de desempleados». La presidenta madrileña no escatimó críticas hacia nadie: «Los sindicatos no representan a los españoles, una cosa es que haya representantes de los trabajadores, y otra, liberados sindicales».

CC.OO. y UGT, «gamberros»

Aguirre subió el diapasón en una entrevista posterior y tildó de «gamberros» a los miembros de CC. OO. y UGT que el domingo marcharon con miles de manifestantes por Madrid en protesta por los recortes. Poco después de esta salida de tono, el Gobierno regional aseguró que Aguirre había pedido disculpas por emplear el término «gamberro» contra ciudadanos «que ejercieron su derecho constitucional» de manifestarse.

Por su parte, Alfredo Pérez Rubalcaba exigió a Rajoy que convoque el debate sobre el estado de la nación. No hacerlo, advirtió el líder socialista, sería una demostración de la pervivencia de «los tics autoritarios» que están en «el ADN de la derecha española». En este contexto, lo criticó por no explicar en primera persona los ajustes que ha puesto en marcha, una conducta que considera insólita.

En tono irónico recordó que la última vez que se le vio en la sede parlamentaria «fue escapando por el garaje del Senado». Rubalcaba lamentó que la mayoría absoluta «conduzca al PP al totalitarismo» y dijo que eso de silenciar «a los partidos pertenece a otra época», en alusión a cuando Rajoy dijo el domingo que «lo mínimo que podían hacer los socialistas es callarse».

Tras visitar el Centro de Investigación del Cáncer, en Salamanca, reprobó la insistencia de Rajoy en seguir recortando en educación e investigación.