Interior ordena a la policía no usar el término escrache

EFE

ESPAÑA

Los agentes deberán sustituirlo por acoso, amenazas y coacciones en sus diligencias y escritos. Según el SUP es un intento de criminalizar todas las protestas

22 abr 2013 . Actualizado a las 20:06 h.

En el 2012 muy pocos españoles sabrían responder a la pregunta: ¿qué es un escrache? Hoy, a golpe de protesta ciudadana, las acciones emprendidas por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y otras organizaciones se han convertido en una de las palabras dominantes en la actualidad política. Y en los argumentarios del PP, muy preocupado por la presión recibida por sus dirigentes en los últimos meses.

De Cospedal comparó los escraches con el nazismo, pero el ministerio del Interior ha ido aún más lejos. Ha pasado de la demonización a la criminalización y al intento de prohibición. Al menos así lo afirma el Sindicato Unificado de Policía.

La organización sindical ha denunciado una orden que desde el pasado viernes obliga a los agentes a sustituir el término escrache en todas sus diligencias y escritos por las palabras acoso, amenazas y coacciones. Según el SUP, todas las dependencias policiales recibieron el pasado viernes un correo electrónico del Centro Nacional de Comunicación donde la Dirección Adjunta Operativa de la Policía daba la instrucción de no utilizar el término escrache para referirse a las protestas frente a los domicilios de cargos políticos.

«Coacciones, amenazas o acoso»

«En un escrache puede haber o no coacciones, amenazas o acoso», sostiene el sindicato mayoritario de la Policía, que denuncia que estas instrucciones obligarán a los agentes a imputar estos hechos delictivos en todos los escraches y, por tanto, notificar al juzgado el delito y la identificación de las personas acusadas del mismo.

Para el SUP, estas imputaciones pueden suponer que los policías sean acusados por los ciudadanos por interponer denuncias falsas.

En este sentido, el sindicato pide a los policías que no sustituyan la palabra escrache en sus escritos por acoso o amenazas sino por seguimiento, manifestación pacífica o cualquier otra que no suponga imputar un hecho punible a nadie.

«No imputen ningún acto delictivo sin poder demostrar que se ha cometido», solicita a los agentes el sindicato.