Los subsaharianos, al acceder, se dividieron en dos grandes grupos y corrieron al grito de «Barça, Barça» escapando de la Guardia Civil
18 feb 2014 . Actualizado a las 09:59 h.La Delegación del Gobierno en Melilla ha ampliado a alrededor de 150 personas de origen subsahariano el número inmigrantes que han logrado este lunes acceder a Melilla tras protagonizar, junto con un centenar más, un intento masivo de superar la valla fronteriza sobre las 06.30 horas de esta madrugada.
Según ha informado una portavoz de la Delegación, el asalto, protagonizado por unos 250 inmigrantes, de los que 100 quedaron en el lado marroquí bajo custodia de las fuerzas de seguridad del vecino país, se llevó a cabo por la zona conocida como Villa Pajares, ubicada en el tramo comprendido entre Barrio Chino y la frontera de Beni-Enzar.
Heridos entre los inmigrantes
No se tiene constancia de heridos entre los agentes de la Benemérita. Sí entre algunos inmigrantes. En concreto, a las 11.45 horas de esta mañana, cinco de ellos ya habían sido atendidos en el Hospital Comarcal de contusiones diversas y posible fractura o esguinces en algún caso. A esa misma hora, dos de ellos ya habían sido datos de alta. También algunos fueron atendidos de contusiones en el CETI. En ningún caso por cortes.
Según trasmite a esta Delegación la Guardia Civil, en el salto, los inmigrantes actuaron de manera muy coordinada para lograr sortear un sistema anti-intrusión, en el que una vez más participó, junto a los efectivos de la Comandancia de la Guardia Civil en Melilla, el helicóptero destinado al control fronterizo y un módulo de la Agrupación de Reserva y Seguridad igualmente presente en la ciudad para el refuerzo de la vigilancia de la frontera.
«Barça, Barça»
Gran parte de los inmigrantes, una vez rebasaron la valla, se dirigió conjuntamente hacia el CETI, coreando cánticos y consignas de victoria (incluso gritos de «Barça, Barça»). Una vez allí, tumbaron la verja de acceso de vehículos rodados, al intentar entrar prácticamente al unísono al Centro de Estancia Temporal, haciendo uso de la fuerza.
De hecho, el equipo de seguridad que se encontraba a las puertas del centro tratando de contener a estas personas para que la entrada se produjese de manera ordenada no pudo con ellos, motivo por el que acabaron rompiendo la barrera de acceso.
La Guardia Civil contó con efectivos de la Jefatura Superior de Policía en apoyo a las labores de control del grueso de inmigrantes.
También colaboró Cruz Roja, que bajó de lo alto del vallado, en concreto de la verja interior o más próxima a Melilla, a un grupo de cinco subsaharianos que quedó allí encaramado.
La mayoría de los protagonistas del nuevo salto masivo son francófonos y de nacionalidades diversas pero principalmente de Camerún. En todo momento, demostraron actuar bajo una férrea coordinación. Tras el asalto, según informa la agencia EFE, Marruecos ha detenido esta mañana a 58 subsaharianos. Todos eran «emigrantes en situación irregular».