El único superviviente es, de momento, un vecino de Muros que fue rescatado por otro pesquero. Se cree que los cuerpos pueden estar dentro del barco
09 dic 2019 . Actualizado a las 21:58 h.Nueva tragedia en el mar. Un vecino de Muros ha sido identificado como uno de los dos marineros fallecidos en el naufragio del arrastrero Santa Ana a media milla del Cabo Peñas, en Asturias. Otros seis, entre ellos otros dos muradanos, permanecen desaparecidos. Mientras un cuarto vecino de la localidad gallega ha sido rescatado con vida tras hundirse el pesquero. Es, de momento, el único superviviente del trágico naufragio ocurrido esta madrugada en aguas asturianas. El barco, que ha embarrancado contra la isla Erbosa, está casi totalmente hundido. Tan solo sobresale ligeramente la zona de proa. El buque tiene su puerto base en Matosinhos (Portugal) y es propiedad de un armador de Muros, José Balayo.
El marinero gallego fallecido es, al parecer, Manuel Indalecio Mayo Brea, de 50 años de edad y padre de dos hijos. Trabajó toda su vida como carpintero y a raíz de la crisis, debido a la falta de trabajo en su sector, buscó una salida laboral en el mar. Otros dos muradanos, Manuel María Tajes Sendón y Lucas José Mayo Abeijón, están entre los seis desaparecidos.
La tripulación estaba compuesta por cinco españoles (cuatro gallegos y un asturiano, Marcos del Agua Chacón), dos indonesios (identificados por la delegación del Gobierno en Asturias como Suherman y Wasito) y dos portugueses (Francisco Gomes Fragateiro y Víctor José Farinhas Braga). Por ahora, el único superviviente es el segundo patrón y técnico de pesca del barco, Manuel Simal Sande, vecino de la parroquia muradana de Abelleira, que ha sido rescatado con vida por otro pesquero que faenaba en la zona, el Maresco. Simal Sande presentaba síntomas de hipotermia y policontusiones y fue evacuado al puerto de Luanco y de ahí al hospital de San Agustín, en Avilés, donde está recibiendo asistencia médica.
Rescatados un superviviente y dos cadáveres
Los servicios de salvamento rescataron esta mañana dos cadáveres. La Salvamar Rigel los trasladó al puerto de Avilés, a la dársena de San Juan de Nieva. Allí han pasado a disposición de la Policía Judicial que ha procedido a su identificación. Uno de ellos es uno de los marineros gallegos y el otro un ciudadano portugués. Medios aéreos y marítimos continúan la búsqueda de los otros seis tripulantes desaparecidos.
Una de las posibilidades es que los seis desaparecidos se encuentren dentro del arrastrero Santa Ana ya que el único superviviente del naufragio hasta el momento ha relatado que la tripulación estaba durmiendo cuando se produjo el embarrancamiento.
Un equipo de buceadores, con base en Ferrol, ha llegado a la zona del naufragio para participar en las labores de búsqueda. Los responsables del dispositivo de búsqueda confiaban en que la bajada de la marea facilitara a partir de las 17.00 horas la intervención de los buzos, pero el estado de la mar hace que la operación resulte «muy peligrosa» por los fuertes movimientos del barco, que permanece hundido en una zona de muchas rocas.
Pasadas las 18.30 horas se suspendió el operativo de búsqueda de los desaparecidos. Los medios aéreos y marítimos volverán el martes a peinar la zona si mejoran las condiciones del mar y los buzos tratarán de acceder al barco a primera hora si las condiciones lo permiten.
Naufragio de madrugada
El armador tiene otros dos barcos en Asturias. Salieron los tres pesqueros de madrugada a faenar. El Santa Ana tocó unos bajos a la salida del puerto de Avilés. Cuando los otros dos se dieron cuenta del naufragio, ya no pudieron hacer nada. Uno de ellos, el Ciudad de Albufeira, fue el que dio la voz de alarma a las cinco y media de la madrugada. Los tripulantes de los tres barcos habían salido en autobús para Asturias ayer por la tarde desde Muros, según informan desde la delegación de La Voz de Galicia en Barbanza. El barco mide unos treinta metros de eslora y operaba desde Avilés para hacer la campaña de la xarda.
En la operación de salvamento participan el Helicóptero Helimer 203, las lanchas Salvamar Rigel y Salvamar Capella (de Salvamento Marítimo), el equipo de Buceadores de la Base Estratégica de Fene, dos patrulleras de la Guardia Civil y una embarcación de la Cruz Roja. El armador del barco, el muradano José Balayo, está en Avilés siguiendo el rescate.
Tres días de luto
El Concello de Muros celebró un pleno extraordinario en el que acordó la declaración de tres días de luto oficial y la suspensión de todos los actos públicos previstos para estas fechas. En el documento al que se dio lectura en la sesión se indica: «A xente desde concello volve estremecerse con esta nova desgraza, á que se lle xuntan outras moitas que xa figuran na memoria de toda a veciñanza»La alcaldesa de la localidad, Caridad González, destacó que «ahora está el pueblo con un silencio atronador» y que esa situación recuerda otros tiempos en los que era habitual este tipo de accidentes, pero que no por ello es menos grave.