Marta Ferrusola: Una madre coraje con fama de dama de hierro

Julio Á. Fariñas REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Algunos analistas consideran a la mujer de Jordi Pujol la inspiradora del «talibanismo» que se instaló en el núcleo duro de CIU

10 ago 2014 . Actualizado a las 21:13 h.

Marta Ferrusola i Lladós, la esposa y madre de los siete hijos de Jordi Pujol, fue algo más que la primera dama de Cataluña durante los 23 años que su marido estuvo al frente de la Generalitat. Nunca fue una mujer florero, aunque sí una próspera empresaria del sector de las flores. El negocio fue viento en popa, al menos durante ese cuarto de siglo. Era raro acudir en un evento en Barcelona donde no apareciesen por medio sus ramos o contemplar un espacio verde que no tuviese alguna relación con Hidroplant, la empresa de jardinería que montó con unas amigas en el año 1979, que tuvieron que cerrar por ruinosa tres años más tarde y que reabrieron con el mismo nombre cuando vinieron mejores tiempos. En esa segunda etapa solo al puerto de Barcelona le llegaron a facturar más de 20 millones de las antiguas pesetas. También surtían al menos a cuatro consejerías catalanas, a la Feria de Barcelona e incluso consiguieron el contrato de renovación del césped del Nou Camp, que al final resultó un fiasco porque parecía un patatal y tuvieron que retirarlo todo.

La Ferrusola es esa esposa abnegada que a comienzos de los 80 decidió compartir a su marido con la patria, que crio y educó a sus siete hijos como buenos católicos y catalanes. «Me dicen a menudo que represento a la mujer catalana», decía en una entrevista que le hicieron en el Avui en abril de 1984, en plena campaña de las primeras elecciones que ganó Pujol con mayoría absoluta. A los pocos días, en la manifestación de apoyo a su marido por la querella de Banca Catalana, le gritaban las masas: «Això es una dama» (¡esto es una mujer!).

Tres décadas más tarde esta madre coraje, según algunos analistas, acumula las iras del pujolismo sociológico que la responsabiliza de todo lo ocurrido, ya que consideran que fue ella quien alimentó la ambición desmedida de sus hijos, ?al menos de algunos? e impidió que nadie le parase los pies, empezado por Jordi, su marido. Este sector piensa que eso fue lo que llevó al ex honorable a inmolarse para tratar de salvar a sus hijos, a costa de hacerle un daño irreparable al partido.

Algunos políticos catalanes ven en Marta Ferrusola no solo la dama de hierro del pujolismo, también la inspiradora del talibanismo que se instaló en el núcleo duro de Convergencia, al frente del cual estaban su hijo Oriol y Felip Puig. Alguno va más allá y apunta que a los consejeros de la Generalitat o presidentes de las empresas públicas los proponía ella. Se dice incluso que el propio Artur Mas pasó por ese filtro.