Las jóvenes de Cuenca, brutalmente golpeadas, murieron asfixiadas

J. V. Muñoz Lacuna REDACCIÓN

ESPAÑA

Un Tribunal rumano decide hoy mismo sobre la extradición de Sergio Morate, presunto asesino, que al parecer había planeado el crimen y la posterior fuga a través del puerto fronterizo de Portbou

14 ago 2015 . Actualizado a las 12:39 h.

Sergio Morate, el principal sospechoso del asesinato de Marina Okarynska y Laura del Hoyo, de 26 y 24 años, fue detenido ayer en Rumanía, adonde llegó conduciendo el vehículo Seat Ibiza con el que se fugó de España, según fuentes policiales. Morate ya había sido detectado cuando cruzó la frontera francesa en Portbou, Gerona. La policía tenía constancia de sus movimientos gracias a la señal emitida por su teléfono móvil.

Un tribunal del norte de Rumanía decidirá hoy sobre su extradición . «La Corte de Apelación de Timisioara, que dispone de todas las medidas legales para la entrega del presunto asesino a las autoridades españolas, decidirá a lo largo de este día sobre su extradición», explicó a Efe por teléfono la portavoz de la Policía de la provincia de Timis, Mirela Draghicioiu. La funcionaria aclaró además que, junto con el presunto asesino español, se detuvo solo a un ciudadano rumano por supuesta complicidad y no a dos como se había informado inicialmente. «Los agentes han arrestado a un hombre, de 27 años, con cargos de complicidad en el mismo domicilio donde fue detenido» Morate, explicó la portavoz policial. Además, las fuerzas de seguridad de este país han retenido el coche con el que Sergio Morate viajó desde España al norte de Rumanía. 

Amistades en la cárcel

El presunto asesino podría haberse dirigido a Rumanía por la amistad que tenía con un hombre que conoció durante su estancia en la cárcel, que vive en la ciudad de Lugoj. Allí, tras la petición de las autoridades españolas, la policía rumana montó un operativo que llevó al arresto del joven y de otros dos rumanos cuando salían de una vivienda.

Todo apunta a que Morate inició la huida después de golpear brutalmente y asfixiar a Laura del Hoyo y Marina Okarynska, las dos jóvenes conquenses de 24 y 26 años cuyos cadáveres aparecieron a última hora de la tarde del miércoles junto al río Huécar, en Palomera (Cuenca), a diez kilómetros de la capital de la provincia. Así lo revela los primeros datos que se han conocido de las autopsias realizadas ayer en el Tanatorio Ronda Oeste de Cuenca.

Las dos chicas fueron vistas por última vez el pasado 6 de agosto, por la tarde, accediendo al garaje de Sergio Morate Garcés, exnovio de Marina, con quien esta había quedado para recoger objetos personales que aún permanecían en el domicilio en el que habían convivido durante un tiempo. Las jóvenes entraron al inmueble y ya no se las volvió a ver con vida. A partir de aquí, los investigadores tratan de averiguar con qué objeto fueron golpeadas antes de ser introducidas en un coche en el que Sergio las condujo hasta un paraje recóndito del río Huécar para deshacerse de los cadáveres. Se cree que pudo trasladarlas y enterrarlas ese mismo jueves.

Premeditación

También parece claro que este doble crimen no fue algo improvisado, fruto de un arrebato de celos o de rabia puntual. Los investigadores piensan que Morate lo tenía todo calculado. Primero, porque el sospechoso tenía cal en su casa, algo que no es habitual. Además, Laura y Marina no acudieron al domicilio de Sergio sin avisar. Se sabe que Marina lo había telefoneado previamente para comentarle que tenía intención de dirigirse a su casa el 6 de agosto con el fin de recoger sus enseres personales. Como se dio cuenta de que su exnovio se había enojado, pidió a su amiga Laura que la acompañara.

Desde que el supuesto asesino recibió esta llamada hasta que se encontró con ellas en el garaje tuvo tiempo de preparar el crimen.

Se sospecha que no contó con que Marina acudiera a la cita acompañada por Laura, pero esto no fue obstáculo para culminar su negra intención. Eso quizá explique por qué la tumba que se piensa preparó con antelación fuese demasiado pequeña para albergar los dos cuerpos. Uno de los cadáveres quedó parcialmente fuera de la fosa, lo que permitió su descubrimiento en la tarde del pasado miércoles por una persona que paseaba por la zona.

En principio se descarta que el sospechoso cometiese el crimen con algún cómplice. En cambio, sí que se investiga si en su huida Sergio Morate ha podido recibir ayuda de más personas, en concreto de algún expreso que conociese en la cárcel de Cuenca, donde estuvo ingresado hace años por retener contra su voluntad a su novia de entonces, fotografiarla desnuda y colgar las imágenes en Internet. Ante esta posibilidad, la Policía interrogó a un interno colombiano conocido de Morate que, aunque aún cumple condena disfrutó de un permiso el pasado fin de semana. Su participación en el crimen fue finalmente descartada.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha mostrado hoy su «alivio» por la detención del principal sospechoso; de hecho, el ministro ha querido comenzar hoy su comparecencia en el Congreso de los Diputados expresando su «gran consternación» por el crimen y ha trasladado su «sentimiento de cercanía» a los parientes de Laura y Marina por la «tragedia» que están viviendo desde el jueves de la semana pasada, cuando se denunció su desaparición.