La concejala indica que los servicios sociales han de ser para todos
21 jul 2014 . Actualizado a las 13:04 h.Defensora de unos servicios sociales que abarquen tanto a los sectores más desfavorecidos como a las familias normalizadas, la concejala de Benestar Social, Rosa Martínez Beceiro, apuesta por las entidades locales con las que colabora día a día. Xantando en familia ha sido el programa más reciente impulsado por su área, pero ni mucho menos será el último. Ya tiene en mente otro del que no quiere revelar muchos datos, y que estará basado en ayudas económicas.
-«Xantando en familia» generó polémica con el grupo socialista
-Nunca le dimos la espalda a la gente, y si en algo se palpa es en el presupuesto municipal. No lo destinamos únicamente a los que peor lo están pasando. Tenemos conocimiento de la situación de las personas de forma directa, a través de los datos que obtenemos de procedimientos como las becas comedor y el resto de servicios. No los obtenemos por haber hecho ningún trabajo de campo, como dicen ellos. Cualquier crítica de la oposición constructiva, que se haga para mejorar, es positiva. Pero hay que estar al lado, no enfrentados. Creo que se están equivocando.
-¿Delegan en Cáritas la responsabilidad del programa?
-Nosotros nos dejamos asesorar por los que entienden. La decisión política consiste en invertir dinero en un proyecto, pero quienes lo definen son los trabajadores sociales, los psicólogos y las entidades con las que trabajamos todo el año. El ámbito natural del niño es la familia. Y en este proyecto se ofreció una entidad como Cáritas, que trabaja en las parroquias y conoce la realidad de muchas familias con las que también trabaja el Ayuntamiento y los trabajadores sociales hacen un seguimiento. Lo que no son ni Cáritas ni el Concello es un supermercado.
-Están firmando muchos convenios con asociaciones, pero algunas están al borde del cierre
-Algunas que denuncian retrasos en las subvenciones tienen que ser conscientes de que tienen que justificar los gastos en tiempo y forma. En este sentido, Lazos ha modificado un poco su línea de financiación con iniciativas como las carreras populares.
-Asfedro también, y aseguran que necesitan un adelanto mayor. ¿Cree que debería modificarse la Ley de Subvenciones ya que asumen labores sanitarias?
-Es un sistema que está ya bastante flexibilizado, porque se adelanta sin justificar un dinero que es del contribuyente. Tiene que haber cambios internos. Las administraciones no tienen que dar la espalda, pero se ha invertido en convenios con más entidades que antes no tenían nada.
-¿Y qué hay de los niños? Aspaneps alertó de que cada vez reciben a más pequeños que sufren consecuencias de la crisis.
-Es un problema muy delicado que no se puede obviar. Hay menores con familias que sufren serios problemas, por supuesto. Desde el Concello se ponen los recursos para cubrir las necesidades más básicas y salir del problema con servicios como el Centro de Formación y Empleo. Aquí hay cierta demagogia. Se está hablando de hambre y malnutrición. Y creo que en Ferrol ningún niño pasa hambre. Si de algo estamos contentos, es de que en Ferrol se está creando una verdadera red de servicios sociales.
-¿Qué tiene en marcha su concejalía para una ciudad con un censo cada vez más avejentado?
-Cada ciudad tiene sus características. Ferrol tiene un censo envejecido, sobre todo los barrios más céntricos, que han envejecido más que otros más periféricos. Es un censo que además registra pocos nacimientos. Por eso con el Plan de Oportunidades pretendemos hacer de Ferrol una ciudad que esté llena de ellas, que cubra necesidades como la dependencia, la teleasistencia y la ayuda a domicilio con políticas de envejecimiento activo.
-Pero la zona centro no es precisamente la más accesible
-Es un tema que se está flexibilizando. Se colabora con entidades que representan a colectivos de minusvalía, y con Urbanismo se están haciendo rutas y existe una colaboración a diario.
-¿Qué opina del cambio de modelo del 065?
-Ya nos pronunciamos. No es que se haya producido un cambio. El 065 era para personas con plaza en un centro público para desplazamientos de necesidad puntual, y ahora los centros privados van a recibir una subvención para gestionar el transporte. El 065 ahora se limita a lo que tiene que ser. Antes había gente con plaza pública que estaba dejando de tener ese servicio.
-¿Cuál es ese proyecto que le gustaría desarrollar?
-No voy a desvelarlo, pero querría activar un programa de ayudas económicas para los que más dificultades puedan tener.