La asociación vecinal cree que la regularización resolverá la conflictividad
11 sep 2014 . Actualizado a las 13:27 h.Las viviendas de Recimil, propiedad del Concello de Ferrol y arrendadas a sus residentes, podrían pasar a manos de sus inquilinos. La adquisición de pisos es una de las posibilidades a las que se abre el gobierno local dentro de su plan para el futuro del barrio. Una vez abandonada la idea de derribar el barrio actual y construir uno nuevo, como defendían los populares, la venta «es una cuestión que está sobre la mesa para su debate», admitió el concejal de Economía e Facenda, Alejandro Langtry. Y formará parte del análisis que el ejecutivo ferrolano dice querer abrir a la oposición y vecinos para buscar un consenso sobre «qué queremos para el futuro del barrio». El edil recuerda que si algún día se quiere vender el parque municipal de viviendas, será la existencia de los contratos actuales de arrendamiento los que permitirá ofrecer primero las viviendas a quienes residen en ella. «No tiene por qué ser la solución, pero está ahí para el debate», señaló.
Será una cuestión a largo plazo. Lo inmediato será desarrollar el plan de regularización de viviendas que anunciaba el Concello el pasado martes y que fue acogido con satisfacción desde la Asociación de Vecinos de Recimil. «Prácticamente aceptaron todos los condicionantes que proponíamos», señaló su presidente, Jesús Caselas. Considera que para el gobierno local supondrá una liberación del gasto que supone el núcleo de viviendas, que cifran en 1.029, frente a las más de 900 que contabiliza el Ayuntamiento. Además, considera que supondrá una adecuación de los arrendamientos conforme a la ley. Además, cree que la oficina de atención al inquilino permitirá «descentralizar» la información sobre el barrio. Y en conjunto, cree que «va a resolver la crisis de convivencia y la situación de indefensión de los vecinos».
Considera «puede ser factible» que el plan se pueda completar en un año y ese es el horizonte temporal en el que aguarda que Recimil puede ser de nuevo un barrio agradable donde vivir.
Caselas señala que hay vecinos que llevan más de veinte años a la espera de poder regularizar los contratos y que estos deberán ser los que tengan prioridad un plan que se desarrollará por fases.
Reunión de arrendatarios
De hecho, está convocada una reunión para el próximo lunes a las seis de la tarde en el CIFP Ferrolterra -antiguo Marqués de Suanzes- para informar a los vecinos con problemas en los arrendamientos, a la que se prevé que asista Langtry.
Sin embargo, la entidad vecinal no está de acuerdo con que se puedan regularizar a personas que ocuparon ilegalmente las viviendas antes de la elaboración del censo, como admitió el edil. «Eso está mal explicado», sostiene. Defiende que se regularizará a los que llevan «toda la vida» en el barrio y que, posteriormente, se intentará con aquellos que, por situación de necesidad, se hayan metido a vivir en los pisos, pero siempre que se acredite su buena convivencia. Y recuerda que se «está a la espera de desahuciar a inquilinos «problemáticos», unos «veinte o treinta». «El objetivo es favorecer el vínculo con el barrio y evitar que se convierta en un gueto», añadió Caselas, que advierte de que el padrón elaborado en mayo del pasado año «ya contiene muchísimos defectos».