El censo de la comunidad descendió en 12.258 personas en doce meses
16 oct 2012 . Actualizado a las 13:09 h.Galicia ha vuelto en un solo año a los niveles de población que tenía en el 2006. Los últimos doce meses han generado el peor registro poblacional de toda la década para la comunidad al haber perdido entre octubre del 2011 y el mismo mes del presente año nada menos que 12.258 residentes en su censo.
La demostración de que la comunidad se encuentra ante uno de sus mayores problemas, y que se agrava exponencialmente además, lo certifica el hecho de que mientras ahora pierde 1.021 habitantes al mes, en el año anterior su censo decrecía en 448 cada treinta días, y en cambio entre octubre del 2009 y octubre del 2010 aún ganaba 67 nuevos residentes cada mes.
Las estimaciones de población hechas públicas ayer por el Instituto Nacional de Estadística fijan el censo de Galicia en este momento en 2.720.243 habitantes, unos 18.000 menos que en el 2008, el último ejercicio en el que creció el número de residentes en la comunidad. Prácticamente todas las variables poblacionales se han alineado negativamente en el último año para que el salto atrás sea tan drástico.
Todo en contra
Hay menos nacimientos; el saldo migratorio es por primera vez negativo en lo que respecta a entradas y salidas al extranjero, y sobre todo, la emigración juvenil se ha disparado de tal forma que lo ocurrido en el último año lastrará la evolución poblacional de Galicia durante varios lustros. Las cifras del INE constatan que 25.472 jóvenes de entre 20 y 34 años han abandonado la comunidad en el último año, es decir 2.122 al mes, o 70 al día.
La cifra de emigración juvenil, en todo caso, sigue una evolución ya marcada en el año anterior, ya que entre octubre del 2010 y el mismo mes del 2011 ya habían sido 22.504 los residentes de las edades citadas que habían cogido las maletas para reiniciar su vida en otra comunidad autónoma o en el extranjero.
Como una nota adversa añadida, por primera vez el saldo migratorio con el exterior es negativo para Galicia. Al extranjero se han marchado en los nueve primeros meses del año 10.662 personas, de ellas 4.109 de nacionalidad española y 6.553 con pasaporte de otros países. Mientras, la llegada desde el exterior se redujo a 8.177 casos, 2.550 españoles y 5.627 extranjeros.
El bajón que genera en el censo la fuga de jóvenes no causa una caída mayor en el volumen de población al aumentar prácticamente todos los demás grupos de edades, lo que denota, en todo caso, el progresivo envejecimiento de los gallegos.
Única alegría
La migración interior (la que se produce entre comunidades autónomas) da la única alegría al censo gallego, aunque sea mínima. Galicia recibió hasta el 1 de octubre 532 personas más que las que se trasladaron su residencia a otro punto de España. En todo caso, fueron 15.675 las personas que pusieron rumbo hacia otra autonomía.