El falso médico que engañó a todos estuvo en la cárcel por el homicidio de una anciana

salvador serantes VIVEIRO / LA VOZ

GALICIA

Ruano ejercía en Galicia tras ser desenmascarado en Madrid y Ecuador

02 dic 2012 . Actualizado a las 20:44 h.

Sorprendió, y mucho, la detención y encarcelamiento del falso médico Miguel Ángel Ruano Álvarez, detenido el jueves en Viveiro. Cuentan que nadie sospechó de él en los alrededor de cuatro años que llevaba ejerciendo como especialista en medicina interna en centros públicos y privados gallegos. Las fotocopias con las que acreditaba titulaciones que nunca ha tenido le permitieron atender a cientos de pacientes en A Mariña y Ferrol, sin que consten quejas por su labor. Hasta que la Policía Nacional de Viveiro lo descubrió, en Galicia burló a casi todos, como había hecho antes en Madrid y Ecuador.

A sus 64 años de edad, Ruano pasó ayer su segunda noche en la cárcel lucense de Bonxe. Sin fianza, el juez de Viveiro lo envió a prisión acusado de usurpación profesional y para saldar sus deudas con la Justicia. Ruano parecía contar con la posibilidad de ser desenmascarado. Ya le sucedió al menos otras dos veces, pero vivió gran parte de su vida de la medicina.

Ante el juez de Viveiro, reconoció carecer de los títulos de licenciado en Medicina y especialista en Medicina Interna. Ruano aseguró haber comprado en Galicia las fotocopias compulsadas que le admitieron como válidas en la Consellería de Sanidade y en dos clínicas privadas. Aunque desde Sanidade dicen que deben comprobarlo, fuentes sanitarias confirman lo que declaró. Que ejerció alrededor de año y medio en el Hospital Arquitecto Marcide de Ferrol e hizo guardias y sustituciones en los puntos de atención continuada de Viveiro, Burela y Ribadeo, así como en otros ambulatorios de A Mariña. Para la sanidad privada trabajó alrededor de ocho meses en la Clínica Cantábrico de Foz, y mes y medio en el Centro Médico As Pías, de Viveiro, donde fue descubierto.

Ruano llegó a Galicia procedente del norte de Ecuador. Allí también ejerció la medicina. Empezó bien, hasta el punto de que llegó a ser presidente de Cruz Roja en el cantón de Pedernales. En julio del 2007 anunciaba la construcción de un hospital. Con el centro en marcha, a finales del 2008 fue clausurado y el falso médico, destituido, porque allí también descubrieron que carecía de titulación.

Libertad condicional

A ese país iberoamericano se trasladó a finales del siglo pasado. Salió de España cuando disfrutaba de libertad condicional, tras permanecer siete años en la cárcel. Eran parte de los diecisiete a los que fue condenado por la Audiencia de Madrid en 1990. La sentencia lo responsabiliza del homicidio de una anciana a en la clínica La Fe de Madrid, a quien, en menos de quince días, le vació una cuenta bancaria, dejándole 68.000 pesetas de los 3,7 millones que tenía. Ese mismo fallo lo penalizó por intrusismo profesional, en esa residencia y otros centros.

Crónicas periodísticas de ese suceso, ocurrido en 1985, relatan que Ruano ejercía como falso médico desde al menos 1981. Inició la carrera, pero la abandonó en el tercer curso. Cumplió el servicio militar en Sanidad y todas sus actividades estuvieron relacionadas con la medicina.

Cuando fue detenido en Viveiro, llevaba años en busca y captura, desde que se fugó a Ecuador. Ahora, además de por este nuevo episodio de intrusismo profesional, tiene que responder por violar la libertad condicional y aún le quedan diez años de cárcel por cumplir.