Este año hubo 3.797 incendios que calcinaron 15.367 hectáreas
10 dic 2012 . Actualizado a las 10:55 h.El 2012 no pasará a la historia por ser un año de muchos incendios. Ha habido hasta la fecha 3.797, lo que lo convierte en el tercer año más tranquilo de los últimos ocho. Sin embargo, los fuegos que se han producido han tendido a ser virulentos. Han afectado a más superficie, ya que en ese ránking las 15.367 hectáreas carbonizadas sitúan al 2012 como el cuarto peor año del período, solo por detrás del 2006, el fatal año de la ola de incendios en el que se quemaron casi 96.000 hectáreas, y los muy malos también 2005 (57.452 hectáreas) y 2011 (42.392).
Hay que tener en cuenta que en tan solo dos de los incendios del año ya se quemó el 15 % de la superficie total afectada. En el de las fragas del Eume, a finales de marzo, se calcinaron 750 hectáreas, que fueron 1.600 en el caso del gran fuego que afectó a O Barco de Valdeorras a mediados de agosto.
El 2012 también se ha caracterizado por sufrir más incendios forestales fuera que dentro de la temporada de alto riesgo, que se inicia el 1 de julio y que este año, en lugar de finalizar el 1 de octubre, se prolongó por precaución hasta el 15 de ese mes. Este año, solo el 36 % de los fuegos (1.388) se produjeron en los meses de verano, en los que se supone que el clima favorece que arda el monte. Los 2.409 restantes se declararon durante el resto del año, especialmente en la primavera, que fue especialmente seca y cálida.
Los datos parecen dar la razón a la conselleira de Medio Rural e do Mar, que ha señalado que es partidaria de dejar de fijar épocas de alto riesgo en función del calendario. Antes del verano, Rosa Quintana vivía un auténtico drama con temperaturas de 30 grados, una gravísima sequía y treinta incendios al día por todo el territorio gallego. En tales circunstancias, se pensó que la temporada de alto riesgo sería un infierno, pero no fue así. Al contrario, fue un período mucho más tranquilo.
De hecho, la de este año fue la tercera temporada de alto riesgo con menos fuegos de los últimos ocho. Los 1.388 incendios que se declararon entre el 1 de julio y el 15 de octubre solo son más que los 844 del 2008 y los 1.051 del 2007. Todos los otros años el balance fue peor: 1.852 en el 2009, 2.087 en el 2011, 2.690 en el 2010, 4.746 en el 2006 y 5.537 en el 2005.
Nuevamente, el balance es peor este año si lo que se analiza es la superficie destruida, ya que esta temporada de alto riesgo fue la cuarta peor de los últimos ocho años con 4.933 hectáreas arrasadas, solo mejor que en el 2010 (11.480 hectáreas), el 2005 (41.033) y el 2006 (92.232). Por contra, el dato es peor que las 1.056 hectáreas afectadas en la temporada de alto riesgo del 2008 y que las de los años 2007 (2.056), 2009 (3.292) y 2011, con 4.684 hectáreas de terreno quemadas. Tampoco fue bueno el 2012 en lo que se refiere a la calidad de la superficie quemada en los incendios, ya que de los últimos ocho años ha sido el tercero peor en superficie arbolada destruida, con 4.970 hectáreas, el 32 % del total.
Solo el 2005 y el 2006 fueron peores que el 2012, con un 38,5 % (22.131 hectáreas) y un 58 % (55.532), respectivamente, de superficie arbolada del total del terreno quemado. Otra vez el 2008 fue el mejor año, con solo un 16 % de superficie arbolada quemada, 998 hectáreas, que fue el 17 % en el 2007 (1.190 hectáreas), el 20,5 % en el 2010 (3.034), el 21 % en el 2009 (2.275) y el 22 % en el 2011 (9.270).
Por legislaturas
En la comparativa de legislaturas, el Gobierno del PP (2009-2012) sale mejor parado que el bipartito PSOE-BNG (2005-2008). En los últimos cuatro años, con Rosa Quintana en la consellería, la superficie total quemada se ha reducido a la mitad, pasando de 166.785 a 83.301 hectáreas, mientras que el número de fuegos también es menor, ya que se pasó de los 24.672 registrados durante la legislatura de socialistas y nacionalistas a los 17.962 de la popular, lo que supone una reducción del 27 %.
En cuanto a la superficie arbolada quemada, durante el Gobierno bipartito la media se situó en el 32 %, mientras que los últimos años, gobernando el PP, esa ratio ha bajado hasta el 24 %. Los populares también obtienen un mejor resultado en el número de grandes incendios registrados, 17 durante la presidencia de Feijoo y 57 en la de Touriño que, eso sí, tuvo que hacer frente a la gran ola de fuegos que hubo en el 2006.
El 32 % del terreno quemado fue arbolado, el tercer peor dato en los últimos ocho años