La ciudad homenajeó ayer a los tres policías muertos en el Orzán hace un año
28 ene 2013 . Actualizado a las 13:54 h.Un lazo tendido al mar, obra de Sonia Romero, José Luis Rey y José Manuel Mihura, rinde homenaje desde ayer a los tres policías nacionales fallecidos hace un año en el Orzán cuando intentaban salvar la vida del joven eslovaco Tomas Velicky. Gracias a una pintura especial que capta la luz del día y la proyecta de noche, Javier López, Rodrigo Maseda y José Antonio Villamor iluminarán para siempre la Coraza, un punto emblemático de la ciudad.
A pesar de la lluvia que no dejó de caer toda la mañana, el acto congregó a decenas de curiosos que no quisieron perder la ocasión para rendir su particular homenaje a los héroes del Orzán. Al caer el sol, que apareció a media tarde, la afluencia de público fue todavía mayor. El monumento iluminado creó gran expectación entre los coruñeses, y fueron cientos los que se acercaron hasta allí, aunque muchos de ellos se quejaron de que no podían leer la placa en memoria de los homenajeados debido al agua que se había filtrado durante toda la jornada.
Los actos comenzaron a las once de la mañana con una misa en recuerdo de los héroes del Orzán y del joven eslovaco Tomas Velicky, a quien el arzobispo Julián Barrio incluyó también en sus oraciones. Una vez en la Coraza, la mujer de Javier López tomó la palabra en nombre de los familiares para agradecer las muestras de cariño que habían recibido. «Solamente algo se muere cuando se olvida», dijo. La emoción se apoderó de las familias por momentos, y la madre de José Antonio, que portaba unas flores rojas, no pudo reprimir las lágrimas cuando un compañero de su hijo, un policía local y Adrián Doce, que participó en el salvamento, pusieron una corona en este «humilde altar», en el que también se recuerda a Juanito Darriba y Francisco Alcaraz, que murieron en la bahía en 1896 y 1897 intentando salvar a otras personas.