Alfredo Rodríguez Fariñas: «La capacidad del barco está ahí, es cien por cien operativo»

Andrés Vellón Graña
andrés vellón FERROL / LA VOZ

GALICIA

JOSÉ PARDO

El marino ferrolano vive con emotividad la baja del «Príncipe de Asturias»

12 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El capitán de navío Alfredo Rodríguez Fariñas (Ferrol, 1958) será el último comandante del Príncipe de Asturias. Ayer, mientras se iban descargando misiles en la base de A Graña, hablaba con emoción del proceso de baja que le ha tocado lidiar.

-¿Cuál es la sensación de ser el último comandante del buque insignia de la Armada española?

-A nivel profesional es un orgullo, una satisfacción. Que la decisión del Estado Mayor es que durante tu mando el barco cese el servicio primero te sorprende, luego te entristece. Pero no puedes dejar de hacer lo que tienes que hacer por cómo sea tu estado de ánimo.

-La entrada en la ría de Ferrol fue especialmente emotiva...

-Sí. Cuando entramos por la ría se pusieron algunas canciones. Alguna de Los Limones...

-Un barco nacido en Ferrol acaba en Ferrol y con un comandante ferrolano. ¿Casualidad?

-Eso es una casualidad. Nadie tiene una bola de cristal como para que se conjunten todos esos planetas. Mandar un barco construido en Ferrol en esta Marina no es complicado, porque casi todos se hacen Ferrol. Y que acabe el barco su servicio en Ferrol... Yo creo que lo que más ha primado ahí es la capacidad de este arsenal y la economía que supone hacerlo en un muelle cerca de sus instalaciones, algo que no ocurre en Rota, donde está a cuarenta kilómetros. Son viajes y viajes y muchos litros de gasoil.

-La decisión de la baja está tomada. ¿Pero considera que el barco podría prolongar su vida útil?

-Esa pregunta es para la Jefatura de Apoyo Logístico de la Armada. Yo voy a hablar con el corazón y no se debe hablar con el corazón en ese sentido. Si alguien del Apoyo Logístico dice, pues mire, el coste sería este, no compensa... No soy yo quién debe de responder a esa pregunta porque no lo haría de forma racional.

-Se la planteo de otro modo. ¿Cómo definiría las capacidades actualmente del buque? ¿Es un barco viejo?

-No. Cien por cien operativo. El día 6 al salir de Rota tomó un Harrier y se fue... Fueron del orden de ocho o diez vuelos en escasamente cuatro horas. La capacidad del barco está ahí.

-¿Cómo definiría a su sucesor como buque insignia, el «Juan Carlos I»?

-No lo conozco. Un sucesor sería que hubiese otro portaviones, pero el Juan Carlos I es un buque anfibio, no es un portaviones. Tenemos un gran buque anfibio con capacidad de operar aeronaves de ala fija. Y para ala fija, hasta que el Juan Carlos I ha superado su calificación operativa solo estaba el Príncipe de Asturias. ¿El Juan Carlos I puede hacerlo? Sí, y parte de nuestra gente de vuelo se ha ido para ese buque para aprovechar su conocimiento y su buen adiestramiento.