Justifican el traslado de centro de una alumna en abril por petición del padre e inadaptación al sistema gallego

e. á. santiago / la voz

GALICIA

El padre de la menor solicita ahora que la Xunta asuma los gastos derivados del transporte escolar

04 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Una alumna del IES Ponte Caldelas fue trasladada a un colegio concertado de la zona en el mes de abril después de que su padre solicitara el cambio de centro. ¿El motivo? Diferente para el progenitor y para la inspección educativa. En el primero de los casos, tal y como denuncia Galicia Bilingüe, se produce porque en el instituto no recibía ninguna materia no lingüística en castellano, cuando la menor viene de otra comunidad. En el caso de la Xunta, el traslado está justificado por varios motivos, tal y como recoge la orden del 12 de marzo.

Primero, porque se demostró una inadaptación debido a su incorporación tardía al sistema gallego, hubo consenso entre los inspectores da ambos centros -tanto el de origen como el de acogida-, así como una petición expresa del padre. En lo que no están de acuerdo los responsables de la Consellería de Educación es en que se incumpla el decreto del plurilingüismo, que obliga a un equilibrio entre lenguas, ya que aseguran que esta norma se cumple con total normalidad. El padre de la menor, respaldado por Galicia Bilingüe, solicita ahora que la Xunta asuma los gastos derivados del transporte escolar, al entender que el traslado se debe al incumplimiento de la norma, algo que niega la Xunta.

Diferente al caso vigués

El caso, sostienen fuentes de la Xunta, es completamente diferente al del menor del colegio Santa Cristina, de Vigo, que sus padres retiraron del centro por un supuesto acoso escolar, y que la Consellería de Educación se niega a trasladar a otro colegio alegando además que el curso escolar está muy avanzado. Desde la Administración educativa insisten en que en el primero de los casos, el de Ponte Caldelas, se aprobó el traslado «debido a dous informes favorables emitidos por inspectores dos centros e por constatarse unha serie de supostos excepcionais que fan necesario o cambio de centro para preservar a súa educación de calidade». En el caso vigués, se denegó la petición de traslado el 24 de abril «faltando mes e medio para o remate do curso, xa que a inspección educativa emite un informe desfavorable por non considerar que exista unha situación de acoso escolar». La Xunta insiste en que el caso de Vigo está en manos de la Fiscalía de Menores.