Protesta por el cambio de custodia de una niña, que debe vivir con su padre en Oviedo
18 may 2013 . Actualizado a las 03:05 h.Unas 250 personas se concentraron ayer en Ourense para mostrar su rechazo a una sentencia de la Audiencia Provincial de Asturias que otorga la guardia y custodia de una niña de seis años a su padre, residente en Oviedo. La familia de la menor inició esta semana una campaña para dar a conocer este caso y lo que califican como un fallo injusto, ya que entienden que la niña tendrá que cambiar el entorno en el que se estaba socializando de forma estable en Ourense.
El padre requirió para sí la guarda y custodia alegando numerosos incumplimientos en el régimen de visitas, aunque la otra parte indica que la niña solo dejó de ir tres fines de semana a Oviedo por motivos médicos o por el mal tiempo. Los convocantes se oponen a la ejecución de esta sentencia y piden a los jueces que la suspendan. Pero un auto del Juzgado de Primera Instancia 7 de Oviedo lleva aparejada su ejecución forzosa, ordenando la entrega inmediata de la niña al padre. El juzgado remitió un oficio a la Policía Judicial para la localización de la menor -que está en paradero desconocido como su madre- autorizando la entrada en cualquier domicilio en que estas se encuentren. Por esta situación, la niña ha dejado de ir al colegio en el que estaba escolarizada en Ourense.
El padre afirma que lleva dos meses y medio sin poder ver ni comunicarse siquiera telefónicamente con su hija. «Un juez no quita la custodia a una madre porque sí. No me gusta esto, pero me tuve que defender», dijo ayer el padre, quien ha denunciado a la madre por sustracción de menores.
La familia materna critica que la trabajadora social de Oviedo no tuvo interés en conocer el entorno de la niña en Ourense. Consideran que estos equipos psicosociales realizan sus informes en secreto, sin proporcionar los resultados de los test o de los dibujos de la familia, en los que el tribunal de la Audiencia de Asturias fundamentó la sentencia que estimaba el recurso presentado por el padre.
El tribunal rechazó las preguntas sobre la metodología utilizada por el equipo psicosocial, según el letrado de la madre, quien cuestiona que el tribunal no quisiese escuchar a la menor y solo atendiese a los informes de este equipo -que apreciaban que la madre dificultó el contacto paterno filial- sin tener en cuenta otros favorables del colegio y que sostenían que la niña asumía con naturalidad su situación.