Faltar al respeto al público en conciertos será infracción grave

m. cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

La Xunta penará con hasta 601.000 euros la venta de más entradas de las debidas

03 jul 2013 . Actualizado a las 15:50 h.

Liarla parda sobre el escenario, lo justito. El anteproyecto de Lei de Espectáculos Públicos e Actividades Recreativas, cuyo contenido la Xunta negocia con el sector estos días, marca líneas rojas, entre otras cosas, para la celebración de conciertos en el futuro. Así, en su artículo 34, tipifica como infracción grave «a falta de respecto ou provocación intencionada do artista cara ao público con risco de alterar a orde». ¿Castigo? De 301 a 30.051 euros a abonar por el autor de la falta o, en su defecto, como responsable solidario, por el promotor del recital. Se trata de la misma multa prevista para los casos de aquellos intérpretes que se nieguen a actuar «sen causa lexítima acreditada ou razóns de forza maior debidamente xustificadas».

El borrador de norma no solo fija deberes para los cantantes, sino también para quienes los contratan, así como para los espectadores. Estos últimos, por ejemplo, igualmente bajo amenaza de palo económico, tendrán que tratar adecuadamente a los músicos y abstenerse de «adoptar comportamentos que poidan crear situacións de perigo ou alteracións da orde». Tampoco podrán «exhibir símbolos, roupa ou obxectos» que «inciten á discriminación por razón de xénero, racismo, homofobia ou xenofobia», sean contrarios a derechos fundamentales o bien directamente realicen apología de delitos.

Los organizadores de conciertos, por su parte, quedarán obligados a contar con seguridad privada en los recintos para cada cita con más de cien asistentes, amén de a devolver todo el dinero cobrado a los usuarios «cando o espectáculo sexa suspendido ou modificado nos seus aspectos esenciais». Además, habrán de suscribir pólizas de seguro de cuantías variables en función de los aforos: hasta 700 personas, 900.000 euros de cobertura mínima; menos de 1.500, 1.200.000; de 5.000 para abajo, 1,5 millones...

La ley, a tenor de su redacción provisional en las cláusulas 33.2 y 34.2, castigará con dureza la venta de más entradas de las autorizadas a despachar por la Administración. «Superar o aforamento máximo permitido cando non comporte un grave risco para a seguridade das persoas» se multará con un tope de 30.051 euros. Pero si, efectivamente, se constata que existe ese riesgo, la jugada se pagará con hasta 601.012, con independencia de posibles responsabilidades penales.

Veto a citas sexistas

Por regla general, de acuerdo con el artículo 5 del documento, quedarán prohibidos todos los espectáculos que fomenten el sexismo. 17 puntos más adelante, el texto también veta cualquier clase de cita en cuya promoción o publicidad se incumpla el principio constitucional de igualdad o bien se induzca a los menores, directa o indirectamente, a consumir alcohol, tabaco o drogas no legales.