En la época estival es cuando más urgencias se producen y menos reservas hay
23 jul 2013 . Actualizado a las 10:35 h.«Las donaciones de sangre han bajado un 1 % y estamos padeciendo un verano muy intenso». Es la advertencia del responsable de donaciones de sangre en Galicia, Antonio Carcedo Calvo, que ayer presentó en Baiona una campaña en la que participan varios servicios de sanidad y que busca una mayor implicación y concienciación ciudadana para poder salvar vidas. En plena época estival es cuando más urgencias se producen y menos reservas hay. El Grupo A+ sigue siendo el más buscado, ya que es el del 37 % de los potenciales beneficiarios, pero también hay que subir las donaciones de los otros grupos.
Las estadísticas aportadas por Antonio Carcedo apremian a la movilización. «En Galicia estamos perdiendo unas 500 donaciones desde que empezó el mes de julio», confirmó ayer. Las consecuencias de estos recortes son obvias y mortales. «Lo habitual a estas alturas es tener unas 2.200 donaciones a la semana; pero este año estamos en las 1.700», señaló. Carcedo Calvo considera que «la situación es preocupante», pero no se plantea de momento actuaciones como las de tener que cerrar quirófanos.
Preocupa la merma pero también las causas. El servicio de donaciones considera que este descenso de los niveles de participación «está muy vinculado con el estado de ánimo de las personas». Al parecer, es más difícil conseguir que los donantes habituales acudan cuando se les llama y las reducciones de plantillas en las empresas también reducen las campañas. Se entiende que los voluntarios pierden disposición y optan más por la playa.
Tanto Antonio Carcedo como Antonio Varela, coordinador de transportes de Fátima, el jefe de servicio del centro de salud de Baiona, Lorenzo Pousa, y el presidente de la asociación de donantes y receptores de órganos de Vigo, Celso García Estévez, estarán durante toda la jornada de hoy en Baiona para intentar revertir la tendencia.
España se mantiene, y con diferencia, como número uno en el ránking de donantes y trasplantes de todo el mundo. Los gallegos siguen sin estar a la altura. «En España, de media, una de cada 4 o 5 familias se niega a autorizar la donación; en Galicia es una de cada 3», confirma Antonio Varela.