El presidente de la Xunta afirma que en el 2014 no se prevén «ajustes reseñables» en gasto social
15 sep 2013 . Actualizado a las 23:43 h.«Espero que el 2014 sea el año del inicio del crecimiento económico». Así afronta el presidente de la Xunta los albores de un curso político para el que cuenta con un PSOE «distinto».
-Antes del verano pronosticó que, a la vuelta de agosto, regresaría la normalidad al Parlamento. Como vidente, desde luego, no se ganaba usted la vida.
-Hay algunos que intentan ocultar que hemos tenido un muy buen verano de turismo, que nuestros datos económicos van mejorando, el récord de exportaciones, que el curso empieza con gran tranquilidad...
-Vamos, que la oposición la monta para tapar sus logros.
-Cuando uno no tiene ideas ni alternativas, usa el insulto y la descalificación. Cuando acabe la legislatura, si no cambia la oposición, los gallegos recordarán de ella algún puñetazo que otro y un conjunto de insultos muy graves, pero ni una propuesta.
-Pues, a tenor de las encuestas, parece que a AGE, con ese estilo suyo, no le va nada mal...
-Yo no sé cómo se reparte el voto entre la oposición. Lo que sí digo es que el PPdeG en estos momentos es un partido que estaría en condiciones de revalidar su tercera mayoría absoluta.
-Así que, si hoy hubiera elecciones, usted volvería a ser presidente tras los comicios.
-Yo no lo sé, pero el partido...
-De modo que no se va a presentar a unas terceras elecciones.
-Si hoy hubiera elecciones aquí, estoy convencido de que el partido sacaría otra absoluta.
-¿Con usted?
-Hoy por hoy, estoy yo.
-¿Y estará?
-Octubre del 2016, tres años. Todo ese tiempo queda.
-¿En qué aguarda que cambie el rol del PSOE en la oposición tras el relevo de Pachi Vázquez?
-Me gustaría que regresara al Parlamento, que estuviese.
-¿No lo está?
-No. Desde el mismo momento del discurso de investidura, en que rompe la costumbre sagrada de ir a felicitar al presidente elegido, no está. El PSOE lo que hace es seguir las artistadas de uno o dos diputados de la Cámara. Y eso es un problema.
-Hablando de felicitaciones, lamenta Besteiro que ya lo han llamado todos menos usted...
-Yo creo que hay que felicitar a la gente cuando asume los cargos. El señor Besteiro, que creo que va a ser el secretario xeral del PSdeG, tendrá mi llamada el día de su designación. Ahora no sabría por qué felicitarle.
-Como en el Parlamento, también está que arde la cosa en los montes. Pasan Gobiernos, años... y el problema sigue ahí.
-Lamentablemente. Este es uno de los problemas estructurales más graves que tenemos en Galicia, un asunto que tiene que ir calando en la conciencia ciudadana. Estamos ante un grave problema de orden público.
-¿Solamente eso?
-Mire, si alguien coge un arma por la calle y dispara a la gente, seguro que la pregunta no es qué tal tratan a los heridos en los hospitales, sino cómo detenemos al del atentado.
-O cómo no se hizo antes el esfuerzo de educarlo para que no delinquiese, de prevenir.
-Insisto. Hay gente que está atentando en los montes. Por eso tenemos uno de los mejores sistemas de extinción de Europa, 7.000 personas que se juegan la vida a diario. Adicionalmente, además de modificar el Código Penal y de una serie de iniciativas judiciales que adoptaremos en la Xunta, hemos de mejorar la política de Interior y concienciar a las fuerzas y cuerpos de seguridad de que las líneas de investigación de incendiarios tienen que durar todo el año, no solo el verano.
-Ya. ¿Y la prevención no falla?
-Mire, el 98 % de los montes gallegos son privados. Debemos hacer una serie de reflexiones sobre las obligaciones de sus propietarios, como las tienen los dueños de las fincas urbanas, que las protegen e incluso las aseguran. Tienen que saber que las propiedades conllevan derechos y obligaciones.
-¿La Administración no debería estar ahí para recordárselo?
-Sí, claro. Al final de la legislatura espero que este tipo de cuestiones las tengamos. Y espero otra cosa: hace pocos años, en una riña matrimonial, determinadas actitudes del marido sobre la mujer eran socialmente disculpables, cuando hoy la violencia de género es un delito que la sociedad contesta. Eso mismo hay que traerlo al ámbito de los incendios, que ese delito repugne como el otro.
-Mucho antes que eso aprobarán los Presupuestos del 2014. ¿Se avecinan nuevos recortes?
-Tenemos un objetivo para el año que viene: llegar al 1 % [del PIB] de déficit público, y bajando las aportaciones del Estado.
-O sea, que sí los habrá.
-Galicia es de las comunidades mejor preparadas para lograr ese objetivo sin hacer ajustes importantes. Por lo tanto, desde el punto de vista del gasto social, no se prevén ajustes reseñables el año próximo.
-¿Y no reseñables?
-Estamos ahora mismo confeccionando el presupuesto.
-Lleva un par de semanas insinuando que, con esas cuentas, podrían introducir algún alza fiscal. ¿Por dónde van los tiros?
-No hemos insinuado nada, hemos dicho que vamos a cumplir el 1 % de déficit y a mantener el gasto social. Y, a tal efecto, la conselleira de Facenda tiene que establecer los presupuestos. En eso está. Pero, si alguien dice que vamos a incrementar el impuesto de la renta, ya le digo yo que los gallegos no pagarán un euro más de IRPF, no subirá.
-El IRPF no, vale. ¿Cuál sí?
-Reitero: déjeme que elabore el presupuesto. Le avanzo que no subiremos los impuestos, en ningún caso, por encima de ninguna otra comunidad autónoma.