Lo hizo con una licencia de obras menores a nombre de su pareja y sin el permiso de la Xunta
25 oct 2013 . Actualizado a las 10:49 h.José Manuel Lomba aumentó un 250 % el volumen de su casa cuando era inspector urbanístico de Nigrán. Lo hizo con una licencia de obras menores a nombre de su pareja y sin el permiso de la Xunta. La Axencia de Protección da Legalidade Urbanística ha concluido ya la instrucción del procedimiento abierto por esta presunta irregularidad. El Concello le apartó de las funciones de vigilante urbanístico cuando la Xunta admitió a trámite la denuncia de la Policía Autonómica y del Seprona. El informe del expediente de reposición de la legalidad urbanística concluye que las obras que realizó no se adaptan al planeamiento y rechaza todas las alegaciones que Lomba presentó para defender la edificación.
La antigua casa que empezó a reformar en el terreno de su propiedad tenía 88 metros cuadrados de superficie y 325 metros cúbicos de volumen y se convirtió después de las obras en una nueva edificación de 222 metros de superficie y 905 metros cúbicos de volumen. Este incremento es muy superior al que permite la ley de suelo de Galicia, que solo lo permite hasta en un 50 % y en casos muy excepcionales.
Suelo rústico
La vivienda se encuentra en suelo rústico, donde están prohibidas las obras nuevas con fines residenciales no vinculadas a la explotación agropecuaria. La ley permite reconstruir y rehabilitar las edificaciones tradicionales para poder vivir en ellas, pero siempre que se respete la estructura y el volumen original.
No fue el caso. Según el informe de la Xunta, las obras incrementaron el volumen y afectan al diseño exterior y a la estructura. Además, no quedan trazos de edificación original, «senón unha edificación nova totalmente diferente, con distinto tamaño e volume».
Tras la denegación de las alegaciones, la Xunta ha concedido un nuevo plazo de diez días para presentar otras.