El Valedor do Pobo actúa de oficio ante la «indefensión» de los vecinos y pide al alcalde información sobre el caso
07 nov 2013 . Actualizado a las 16:34 h.El valedor do pobo en funciones, José Julio Fernández Rodríguez, abrió una queja de oficio «alarmado» por la situación de precariedad que padecen los vecinos del concello ourensano de Punxín, que no pueden consumir el agua de la traída dada su contaminación natural por arsénico. Fernández Rodríguez remitió un escrito al alcalde, el popular Manuel Vázquez, en el que le solicita que informe de las comprobaciones realizadas sobre la calidad del agua de consumo y de las medidas adoptadas por la empresa concesionaria del suministro para su control. Según indica, la Organización Mundial de la Salud fija el límite en 10 microgramos de arsénico por litro y en algunas aldeas de Punxín se llegó hasta los 23. Los vecinos llevan más de un año sin consumir agua del grifo y desde hace dos meses el Ayuntamiento la envía embotellada una vez por semana para el uso de los afectados. El valedor explica que al problema se suma que en el 2012 el servicio de aguas fue privatizado y que desde entonces los vecinos hacen frente a incrementos que llegan a triplicar las facturas que recibían hasta ese momento. Fernández Rodríguez destaca la «indefensión» de los vecinos, que han acudido al Concello y a la Diputación, sin que se les haya dado más respuesta que la entrega de los bidones una vez por semana. El Concello tiene un plazo de 15 días para facilitar toda la información.