Los sindicatos ven un ánimo privatizador y la consellería de Sanidade lo niega
26 nov 2013 . Actualizado a las 12:27 h.El decreto autonómico, anunciado pero aún no publicado, sobre la creación de áreas de gestión clínica está enrareciendo el ambiente en el ámbito sanitario. Mientras el Sergas niega cualquier atisbo de ánimo privatizador de la sanidad, los sindicatos han comenzado a levantar ya la voz de alarma sobre las consecuencias de constituir nuevas fórmulas en la gestión de los servicios médicos que, a su juicio, darán entrada por la puerta de atrás a intereses privados. CESM, O'Mega, CC.OO., CIG y TSP ya han convocado una huelga para los días 9 y 10 contra los recortes y en señal de rechazo al cambio en la gestión, que comparten también instituciones como el Colegio de Médicos de Pontevedra.
La creación de las áreas de gestión clínica, fórmula ensayada ya en los noventa con Romay en Sanidad, fue refrendada en el último debate de la autonomía, una de las pocas propuestas en las que el PP obtuvo el apoyo del BNG. Sobre el papel, y según anunció la consellería, se recurrirá para ello a estructuras sin entidad jurídica propia formadas por profesionales de distintas especialidades con recursos y autonomía sobre el personal asignado y un presupuesto anual que podrán revertir en las propias unidades o en incentivos económicos a sus profesionales si cumplen los objetivos de calidad marcados por la Administración y logran un ahorro de recursos. Los responsables de estas unidades, que según la Xunta persiguen implicar en la gestión de los recursos a los profesionales que con sus decisiones determinan gastos, serán en teoría de libre designación, lo que fue cuestionado por los grupos de la oposición. A la espera de que el DOG confirme lo anunciado por Sanidade, no se modificaría el estatus laboral del personal, otra de las reclamaciones planteadas por los sindicatos, y en todo caso la adscripción del personal será voluntaria.
Según la Xunta, el año próximo funcionarán al menos 21 áreas de gestión clínica en Galicia, tres por área de integrada y una de ellas deberá ser de atención primaria. Ya funciona una en Ferrol, salud mental, y Ourense ultima la de oncología.