Rosario Porto vestirá la toga y se autodefenderá en el caso Asunta

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Se sentará con el resto de los letrados y podrá preguntar a su exmarido. SIGA AQUÍ TODA LA INFORMACIÓN SOBRE EL CASO

17 ene 2014 . Actualizado a las 14:32 h.

Rosario Porto, imputada y en prisión desde hace más de tres meses como presunta autora, junto a su exmarido, Alfonso Basterra, del asesinato de su hija Asunta, ha decidido habilitarse como abogada y autodefenderse en el proceso abierto contra ella por este crimen.

La madre de la pequeña, abogada de profesión, volverá a vestir la toga y se sentará junto al resto de los letrados de las defensas: El suyo, el penalista coruñés José Luis Gutiérrez Aranguren, que seguirá dirigiendo la defensa de Porto, que actuará como coabogada, y la de su exmarido, la compostelana Belén Hospido.

El letrado de Porto explicó ayer que ha sido él mismo el que le ha propuesto a la madre de Asunta que actúe como coabogada en el proceso «porque están saliendo cosas sobre su vida íntima y personal que es ella la que mejor conoce y sabe y considero que será de mucha ayuda que esté sentada a mi lado y que así me pueda indicar qué preguntas puedo hacer o que datos no son correctos», señaló Gutiérrez Aranguren.

El banquillo

La nueva condición de coletrada de Rosario Porto le dará la oportunidad de interrogar al otro imputado en el caso, su exmarido Alfonso Basterra, así como a todos los testigos que a partir de ahora comparezcan para prestar declaración a petición de las partes.

La madre de la niña asesinada no tendrá, además, que sentarse en el banquillo de los acusados, como ocurría hasta ahora, y tan solo deberá quitarse la toga y abandonar el banco de los abogados defensores cuando sea ella misma la que tenga que prestar declaración, ya sea ahora como imputada o cuando se celebre el juicio y ya esté formalmente acusada.

Rosario Porto ya no ejercía como abogada cuando fue asesinada su hija Asunta. Había cerrado el despacho de abogados que heredó de su padre y actualmente se dedicaba a asesorar a empresarios, especialmente a uno que tenía problemas con unos negocios inmobiliarios en Marruecos y con el que surgió una relación sentimental que fue la que motivó su separación de Alfonso Basterra, que llegó a descubrir esa infidelidad.