Falsos peregrinos desvían a los auténticos de los albergues de Sarria para que vayan a otros

X. R. P. SARRIA / LA VOZ

TRIACASTELA

Se trata de dos personas, casi siempre las mismas, que frecuentan el tramo elntre O Cebreiro y Triacastela haciendo la ruta al revés

15 may 2014 . Actualizado a las 11:40 h.

El incremento de plazas en albergues de Sarria, punto de partida para una tercera parte de los peregrinos que hacen el Camiño Francés al estar justo a cien kilómetros de Santiago, distancia exigida para lograr la Compostela, ha traído como primera consecuencia negativa una competencia desleal por parte de alojamientos de otros puntos del mismo itinerario.

El sistema para atraer gente que han detectado en las últimas semanas los albergueros sarrianos es que hay dos personas, aseguran que casi siempre las mismas, disfrazadas de peregrinos, que frecuentan el tramo entre O Cebreiro y Triacastela haciendo la ruta al revés. Estos falsos peregrinos se dirigen a los caminantes para decirles que no pierdan el tiempo en detenerse en negocios del casco urbano de Sarria. Les dicen que todos están repletos y no encontrarán plazas. Su consejo es que se dirijan a otros establecimientos fuera de la villa.

Al principio abordaban a los posibles clientes entregándoles folletos de algunos locales, táctica que abandonaron para pasar más desapercibidos, y ahora solo les acosan de palabra.

Los propietarios sarrianos de albergues aseguran que se cuentan ya por centenares las personas que les preguntan si tienen plaza y se sorprenden cuando la respuesta es afirmativa. A renglón seguido, les explican que les abordaron para decirles que en Sarria estaba todo lleno y les proponían alternativas, curiosamente siempre la de un albergue de gran capacidad.

Los hosteleros son conscientes de que esta manera de actuar no supone realmente un acto delictivo, pero sí una manera de competencia desleal que consideran que debería erradicarse, sobre todo para evitar que los visitantes se formen la idea de que el camino es un mercado persa en el que todo vale.