Ayer estuvo abierto al tráfico durante una hora y media, desde las nueve y media hasta las once, pero después tuvo que cerrarlo por la niebla y así permaneció toda la madrugada y durante las primeras horas de esta mañana
30 jul 2014 . Actualizado a las 17:24 h.La autovía del Cantábrico, la A-8, se reabrió al tráfico ayer a última hora de la tarde -pasadas las nueve y media- en el tramo comprendido entre Mondoñedo y Abadín, aunque tuvo que cerrarse de nuevo sobre las once de la noche a causa de la baja visibilidad provocada por un denso banco de niebla. Y así ha permanecido durante toda la madrugada y en las primeras horas de esta mañana. Patrullas de la Guardia Civil vigilaban las rotondas donde salen los conductores de la autovía mediante una línea de carteles y pivotes sobre el asfalto.
Finalmente sobre las once de esta mañana ha podido ser abierto de nuevo al tráfico después de que despejara la niebla.
La decisión se tomó pese a que durante los pasados días, tras la colisión múltiple en la que el sábado murió una mujer, se han instalado nuevas medidas de seguridad en la carretera y a que se ha renovado el asfalto en la zona en la que se produjo el accidente, donde el trazado discurre a una altitud de casi 700 metros.
Fueron las de estos últimos días unas jornadas largas. La empresa mariñana Isidro Otero completó el cambio de pavimento para conseguir así mayor seguridad de la circulación a lo largo de unos 160 metros, y ayer se pintaba ese nuevo firme. Mientras se desarrollaban esos trabajos, durante toda la tarde se mantuvo la incertidumbre de si se produciría o no la reapertura, y pasadas las nueve y media desde el Ministerio de Fomento confirmaban que había quedado definitivamente operativo este complicado tramo de la A-8. No obstante, el tráfico a esa hora era mas bien escaso y hubo todavía quienes optaron por circular por la nacional 634.
Se han instalado dos paneles informativos en las entradas del tramo Mondoñedo-Abadín que a partir de ahora anunciarán la situación de niebla densa para que los automovilistas puedan abandonar la autovía tomando la salida hacia la vieja carretera general. A la vez se han colocado nuevas señales de alta reflectancia limitando la velocidad aún más, a 80 kilómetros por hora, y solo se activarán en caso de que se levante niebla y se produzca una situación de máximo riesgo.
Tal como señalaban desde el Ministerio de Fomento, han sido instaladas igualmente en el pavimento más balizas de niebla similares a las colocadas por Tráfico en la A-6 a su paso por el puerto de Pedrafita, que podrán ser accionadas por la DGT en caso de que sea necesario. Las medidas no acaban ahí, pues se han reforzado los sistemas de medición con nuevas estaciones meteorológicas y visibilímetros.
Ayer en el pleno de la Diputación Provincial de Lugo se exigía a Fomento la mayor seguridad para los automovilistas que circulen por la A-8. También el Ayuntamiento de Mondoñedo instaba al ministerio en una moción plenaria a ofrecer seguridad en la Autovía Cantábrica. Por su parte, Fomento garantiza que habrá seguridad y ofrece, en caso de que existan dudas o en situaciones de máximo riesgo, salidas alternativas.