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Operación Patos: Contrato millonario en Balaídos tras influir en directivos del Celta y del Concello de Vigo

a.martínez, e.v.pita VIGO / LA VOZ

GALICIA

El constructor investigado compró cemento a un directivo del club para asegurarse la adjudicación, según el informe policial

18 sep 2015 . Actualizado a las 08:51 h.

La investigación llevada a cabo por la UDEF sitúa al constructor Enrique Alonso Pais como un auténtico conseguidor de obras públicas gracias a su influencia sobre políticos y funcionarios. Uno de los últimos grandes contratos que se adjudicó fue la primera fase de la consolidación estructural en el estadio de Balaídos, por un importe de 1.135.016 euros.

La junta de gobierno del Concello de Vigo anunció en diciembre del 2014 la licitación a la UTE Stradia Infraestructuras y GPD Construcciones. La primera de ellas es, en realidad, Eiriña. El cambio de denominación podría deberse a que la empresa del imputado ya había saltado a los medios de comunicación después de la operación policial desarrollada en el mes de febrero de ese mismo año. Las escuchas telefónicas realizadas a los implicados en la gestión de esta obra hacen pensar a la instrucción judicial que existen muchos indicios «de las influencias ejercidas por Enrique Alonso Pais, tanto en los directivos del Celta como en los del Concello de Vigo, que han sido determinantes para lograr la adjudicación final de las obras». Además constan conversaciones grabadas en las que se pone de manifiesto el interés que tenía Alonso Pais por la obra.

Los investigadores apuntan que para asegurarse la adjudicación de las obras de Balaídos compró a la empresa Hormigones Valle Miñor, de la que forma parte el directivo del Celta Ricardo Barros y de la que fue gerente el concejal Ángel Rivas (imputado en el caso Hormigón), el suministro de cemento para la obra de la avenida de Lugo, adjudicada por el Concello de Pontevedra. Las obras en Balaídos iban a contratarse por el procedimiento de urgencia alegando problemas de seguridad y se llegó a pedir al empresario un presupuesto para iniciar los trabajos. El Ayuntamiento cambió de planes y ordenó a un arquitecto municipal la elaboración de un proyecto, pero tomando como base la memoria y el presupuesto presentado por Eiriña. El informe policial concluye que, con el objetivo de simular la concurrencia de empresas en la contratación, se recurrió a una empresa amiga.