Manuel Prieto: «Hay intereses políticos que jugaron desde el principio contra el maquinista»

Pablo González
Pablo González REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Para Manuel Prieto, abogado del maquinista imputado, «la vía en Angrois estaba huérfana de seguridad»

09 oct 2015 . Actualizado a las 12:08 h.

Manuel Prieto, abogado del maquinista Francisco José Garzón Amo, no comparte prácticamente ni una sola línea del auto que cierra la instrucción del caso Alvia.

-Resuma lo que no le gusta.

-No lo comparto en absoluto. Imputar solo al maquinista es no depurar todas las responsabilidades que confluyen en el accidente. El propio auto reconoce que hay defectos de seguridad. Para nosotros la vía estaba huérfana de seguridad, en sistemas, en señales y en análisis de riesgo. Y todo esto debe llevar a una responsabilidad penal.

-El juez se basa, entre otras cosas, en las declaraciones de su defendido. ¿Cree que esa comparecencia se hizo en condiciones óptimas para que pudiera defenderse?

-Al maquinista lo sacaron a los dos días del hospital después de estar sedado y con sonda, y lo llevan a un calabozo. No podía acostarse por las lesiones y tuvo que estar sentado en el suelo con las costillas rotas porque le negaron una silla. De allí lo llevaron a declarar y él declaró lo que declaró. Y admitió el exceso de velocidad. Pero eso es una obviedad. La cuestión es por qué. ¿Por la acción del maquinista o por la falta de medidas de seguridad?

-También se basa en el informe de la Comisión de Investigación de Accidentes.

-Y en ese informe no hay ni una sola recomendación sobre el factor humano y hay trece sobre seguridad. Nadie hace una recomendación sobre lo que está bien.

-Y por último, en los peritos.

-El informe que se hizo sobre el tren es parcial, pues no se analiza la certificación del tren original. El otro perito, Carballeira, no tiene ni idea de lo que escribe porque lo ha copiado de otros informes. El de César Mariñas está trabajado, cuestiona la seguridad en la curva y es imparcial, y ese es precisamente al que el juez menosprecia. Falta un poco al respeto a mucha gente.

-Le pregunté por la declaración de su defendido porque en ella se autoinculpa.

-No se autoinculpa. Solo dice la velocidad a la que iba.

-¿Cree que hay presiones para responsabilizar solo al maquinista?

-A mi me cuesta mucho dudar de la Justicia. Pero en este caso hubo desde el principio intereses políticos que jugaron contra el maquinista para que fuera el único imputado. Fíjese que Garzón es trabajador de Renfe, una empresa pública. Pero la Abogacía del Estado solo interviene en la causa cuando se imputan a cargos del ADIF. Eso me choca.

-¿Qué opina del papel del fiscal?

-Debe ser el impulsor de la instrucción y apenas pidió diligencias.

-¿Qué va a recurrir del auto?

-Alegaré indefensión porque se rechazan las pruebas que pedí. Y argumentaré que no se puede imputar exclusivamente al maquinista.

-Es curioso, ¿no va a recurrir que se impute a su cliente?

-De momento no. Aquí todavía nadie ha acusado. Cuando se perfilen las acusaciones, haremos nuestro escrito de defensa.

-El juez le recrimina que pida pruebas para imputar a otros.

-Debo defender a mi cliente y determinar las causas del accidente. Cuando todas las causas estén sobre la mesa se verá que el papel del maquinista no es determinante. Si hay unas carencias en seguridad, mi cliente tendrá menos responsabilidad. La verdadera causa del accidente es aquella que, si se elimina, el accidente no se produce. Y solo hay que ver la vía ahora. Ahora no habría accidente. Antes los maquinistas sabían que algo así ocurriría.