José Manuel Rey Varela: «La apuesta social es seria, nada que ver con el cheque bebé de Zapatero»

En otro tiempo, el del propio Feijoo sin ir más atrás, el PP ungía a sus delfines en las plácidas aguas de la obra pública. Pero la crisis restó lustre al cemento. Ahora manda lo social. Es la clave de la última crisis de la Xunta. De ese medido giro preelectoral emerge sobre todos el perfil de José Manuel Rey Varela (Ferrol, 1975), que halló su premio tras un revés en las municipales que encendió la luz roja en su partido. Rey perdió la alcaldía de su ciudad, pero ganó la nueva consellería estrella, Política Social. Feijoo viene de bendecir la apuesta con 77 millones extra a los que gestionaba su predecesora, Beatriz Mato.

-De los retos que tiene por delante, el de mayor calado para el futuro del país es el demográfico.

-Hay tres principales. El demográfico es uno, en el plano de país y en el familiar. Hay que ver cómo somos capaces de ayudar más a las familias para que eso incida positivamente en un problema de país. El segundo es el de la inclusión social. Ayudar a los más desfavorecidos tras una crisis que ha dejado muchos. Y el tercero, la dependencia. Sobre los tres aún hay mucho que trabajar.

-¿Mitigarán el declive poblacional las medidas fiscales y ayudas incorporadas a los Orzamentos?

-Estamos dando un primer paso después de otros que ya dio Galicia, sobre todo, en políticas de conciliación y en reducciones fiscales que la situaron a la cabeza en España. Para llegar al horizonte que la Xunta desea, hay que continuar con el esfuerzo económico que hemos impulsado este año, con 15 millones para tres programas específicos. En esa continuidad será fundamental la evolución de la economía.

-El cheque bebé es tal vez la medida más llamativa, aunque no parece que nadie se anime a tener hijos por 100 euros al mes.

-No. Estamos estructurando cómo va a ser esa ayuda, iniciando un camino serio en materia demográfica y de apoyo a las familias. Cuando hablamos de demografía no podemos hablar de una sola medida. Debemos conseguir ser capaces, a lo largo de varios años, de que Galicia tenga condiciones homologables a las regiones más avanzadas en materia demográfica de Europa.

-¿No se va a quedar entonces en un guiño electoralista que evoca la vieja medida de Zapatero?

-No tiene nada que ver. Este es el inicio de un camino serio. El incremento económico destinado a la familia es muy superior. Hay tres nuevas medidas. Además de esta ayuda directa, el bono guardería y el bono cuidador. Galicia superará en el 2016 la ratio europea de plazas públicas en escuelas infantiles. Y los países que hicieron estas políticas serias y duraderas han tenido buenos resultados. No inventamos nada.

-¿A qué países se refiere?

-Los nórdicos. Además de las desgravaciones y las políticas de conciliación, que ya tenía Galicia, tienen la ayuda directa.

-Ya, pero en los países nórdicos hay empleo. Es el mejor estímulo. Sobre todo, para los jóvenes, porque favorece su emancipación.

-Es indispensable. A medida que los datos de empleo mejoren, también lo harán esas condiciones. Pero llevamos 30 años con un saldo demográfico negativo, y hacen falta otras políticas. Repercuten en el bienestar de las familias, pero también en la sustentabilidad económica de la comunidad, en el futuro de todos.

-Es que llevamos camino de convertirnos en una comunidad subsidiada, con una bolsa de población pensionista que en pocos años superará la de activos.

-Así es. ¿Quién va a pagar las pensiones y la asistencia sanitaria mañana? Esto no es un gasto, es una inversión, que se puede hacer ahora porque hay un contexto económico favorable. Este es el primer año de los últimos seis en el que suben los presupuestos, y la Xunta ha decidido invertir en estas políticas. Este no es el final del camino, y deseo que esta inversión sea progresiva.

-Pero salimos de la crisis con una creación de empleo de baja calidad y con un fuerte aumento de las personas en riesgo de exclusión. ¿Cómo se puede mejorar la respuesta a estos problemas?

-Es cierto que se está creando empleo y que, en muchos casos, no aporta recursos suficientes para llegar a fin de mes. Por eso buscamos medidas para favorecer a esas personas que, teniendo empleo y sin estar en riesgo de exclusión, pasan muchas dificultades para llegar a fin de mes. La Xunta puede hacer ahí un mayor esfuerzo de acompañamiento.

-¿En qué consistirá esa ayuda?

-Estamos trabajando. Está en marcha un plan de lucha contra la desigualdad. Ahí es bueno contar con las administraciones locales y las entidades del sector.

-Galicia tiene en el aumento de la demanda de la renta social un termómetro fiable de cómo sale de la crisis. La Xunta destinaba 20 millones a la risga en el 2009, y en el 2016 ya invertirá 50.

-Es con la recuperación no se acabaron los problemas, pero sí que estamos en una fase en la que se pueden solucionar más.

-Crecen las solicitudes de la risga y también la demora en atenderlas. En el 2014, tardaron 7 meses de media por expediente.

-Esos plazos han mejorado mucho. Tengo el encargo del presidente de que el año que viene no haya lista de espera en la risga. Este conselleiro le dedicará muchas horas. En política social, detrás de los datos hay personas.

«El Estado no va a financiar el 50 % de la dependenica, pero su compromiso debe ser mayor»

Rey Varela defiende el copago para financiar la dependencia, pero admite que hay que ayudar al usuario con menos recursos.

-¿Es la financiación de la ley de dependencia un pozo sin fondo?

-Es una magnífica ley que nace sin financiación y en el peor momento de las cuentas públicas en Galicia y Europa. Aspiramos a atender a 10.000 dependientes más en el 2016 y a que la recuperación económica nos permita seguir aumentando la financiación a un ritmo superior al del crecimiento de las cuentas.

-Bueno, la norma dice que deben financiarla al 50 % el Estado y la Xunta. Y no se cumple ni de lejos.

-No voy a ser capaz de que el Estado cumpla con el compromiso de financiar el 50 %.

-¿Se lo pedirá al ministro Alonso?

-El Estado debe asumir mayor compromiso económico. Podrá hacerlo a medida que vuelva a crecer la economía. Ese crecimiento de las cuentas de Galicia del 4 % para el 2016 nos permite elevar un 12 % el gasto social.

-La revisión del copago dispara el coste de las plazas de residencia. A familias que abonaban menos de 300 euros al mes ahora les piden 800. ¿Sabe del problema?

-Estamos revisando los porcentajes. Son imprescindibles para financiar el sistema, pero deben ser justos. Habrá una renta disponible para las personas con este tipo de recursos. Estamos estudiando todos los casos.

-Necesitará su bagaje municipal para solventar el problema con alcaldes del PSOE y el BNG que rechazan las condiciones del trasvase de servicios del Consorcio de Benestar a la nueva Axencia.

-Abriré un diálogo para buscar entre todos la mejor fórmula.

-Galicia ofreció miles de plazas para refugiados, pero parece que la foto del niño en la playa queda lejos y ese tema se ha enfriado.

-La anterior conselleira [Beatriz Mato] lideró un trabajo muy importante para responder a lo que la UE y España pedían a Galicia. Estamos preparados. Pero a veces hay imágenes que nos llevan a un voluntarismo que no permanece en el tiempo.

Cuestionario discreto

El responsable de Política Social, y jefe de campaña del PPdeG para las generales, reconoce que la fragmentación electoral hace muy difícil una mayoría absoluta.

-¿A menos de dos meses para las elecciones, cómo ve a Rajoy?

-Con muchas ganas de entrar en campaña y de ser presidente otros cuatro años.

-Pues arrastra un gran desgaste, tras una legislatura dura y marcada por la gestión de la crisis.

-Gobernar es desgastarse, lo que no quiere decir que Rajoy no pueda presentar un balance y propuestas de futuro. Ahora será más fácil cumplir nuevas promesas que hace cuatro años.

-¿Comparte la idea de que las mayorías absolutas son pasado?

-No lo diría con tanta rotundidad. La historia dice que esto es cíclico, y que tras grandes crisis económicas vienen otras crisis de confianza y de valores. Estamos en un momento histórico en el que las cosas están cambiando, pero eso no quiere decir que se tengan que acabar las mayorías.

-¿Y ve posible una mayoría absoluta en la próxima legislatura?

-Es muy complicado, porque hay una gran fragmentación.

-¿Qué le sugiere Pedro Sánchez?

-Un poco de frivolidad.

-¿Albert Rivera?

-Un nuevo líder, que tendrá que ser capaz de tomar decisiones cuando de ello dependan cosas.

-¿Pablo Iglesias?

-Casi diría un viejo líder. Porque igual que se cree que no volverá a haber mayorías, fíjese, alguien que decía que sería el próximo presidente del Gobierno vuelve a ser casi una fuerza marginal.

-¿Hubiera cambiado el cargo de conselleiro por seguir como alcalde de su ciudad, de Ferrol?

-Bueno, me presenté para ser alcalde de Ferrol y, en política, no hay nada más satisfactorio para una persona que ser alcalde de su ciudad. El compromiso con Ferrol es irrepetible y permanente.

-El sábado que viene, el alcalde socialista de O Barco, Alfredo García, cogerá oficialmente su relevo al frente de la Fegamp.

-Deseo que la Fegamp sea lugar de encuentro entre alcaldes y con otras administraciones. Y conociendo a la persona que va a tomar el relevo lo veo muy factible.

Cuestionario indiscreto

El conselleiro, que se ha estrenado recientemente en la paternidad, señala que el político debe adaptarse a lo que le pide la calle.

-Conselleiro y padre primerizo. ¿Tiene tiempo para cambiar pañales o echar una mano en casa?

-Debemos aprender de este nuevo tiempo que el que no sea capaz de cambiar pañales en casa al mismo tiempo de ser conselleiro dejará pronto de serlo. La gente aspira a que los dirigentes políticos tengan normalidad.

-¿Falta incorporar más gente joven a la política gallega?

-Ya hay un relevo generacional. Lo normal es que los jóvenes con una experiencia acreditada puedan estar en primera línea.

-¿Qué libro tiene en la mesilla?

-Ahora mismo, solo informes.

-¿Alguna película que le haya gustado? ¿O es más de series?

-Sigo, porque soy un apasionado de la historia, la serie Carlos, el rey emperador.

-¿Practica algún deporte?

-He dejado de hacerlo de forma habitual, por el aumento de responsabilidades. Pero aprovecho momentos del día para correr.

-¿Un rincón especial en Galicia?

-Ferrol. Y dentro de Ferrol, San Felipe. Una ría única, una boca de ría única y un anochecer único.

-¿Se ocupa de las redes sociales?

-Sí. Son un lugar muy importante de comunicación con la gente.

-¿Y colabora el conselleiro de Política Social con alguna oenegé?

-Siempre he tenido algunas de referencia en mi ciudad.

-¿Por ejemplo?

-Dios y Pan, que es una oenegé de Ferrol de la que soy socio. Pero también llevo comida a la cocina económica, que es algo que hacemos todos los ferrolanos.

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