Una gallega en París: «Te queda una gran sensación de inseguridad y horror»
GALICIA
Meri Suárez se encuentra con su hija cerca de donde ocurrieron los atentados de la pasada noche
14 nov 2015 . Actualizado a las 16:47 h.La gallega Meri Suárez Agrasar acababa de aterrizar en París junto a su hija, Sara García, y al llegar al hotel se enteró de la cadena de atentados que causaron una masacre en la capital de Francia. Se encontraban en la ciudad junto a la selección española de taekwondo para disputar un campeonato en la ciudad. Forman parte de la Dobok Escuela de Taekwondo de A Coruña. Están bien pero confiesan que han pasado mucha angustia y mucho miedo.
«La verdad es que llamaba la atención la cantidad de gente que había por la calle y viendo el partido amistoso» (el partido de Francia contra Alemania que tuvo que ser desalojado), afirma esta coruñesa que acompaña a su hija menor, una de los cuatro deportistas gallegos que iban a participar en el Open internacional de París este sábado. La competición, de gran nivel deportivo, fue suspendida tras la masacre de ayer.
«Al principio la información era muy confusa», explica. La delegación deportiva se aloja en una zona cercana a los lugares de los atentados, situada a una media hora caminando.
Han pasado la noche en el hotel y han vivido estos atentados con mucha angustia. «Se palpaba un ambiente muy descontrolado. Estoy con mi hija y eso te angustia aún más. El ruido de sirenas y helicópteros era incesante», relata Meri.
Recuerda con muchísima tensión las noticias que llegaban desde el Bataclan. «Cuando escuchamos que estaban reteniendo a gente en la discoteca... veías que sucedía uno tras otro en diferentes puntos, lo que te lleva a más inseguridad. Además solo el hecho de pensar que atacan a cara descubierta y manifestándose en alto..., era evidente que buscaban hacer el mayor daño posible», afirma.
Este sábado permanecen sin salir del hotel siguiendo las indicaciones de las autoridades francesas que aconsejan no salir a la calle. En la calle se ve «mucha tranquilidad y muy poco tráfico en comparación con ayer. Apenas hay transeúntes», describe desde su hotel en París.
«Veremos cómo evoluciona pero tranquilas no estamos, te queda una gran sensación de inseguridad y horror», dice. Además su prioridad ahora es viajar a A Coruña lo antes posible. «Tenemos el billete para mañana pero estamos hablando con la Xunta a ver si podemos adelantarlo», explica.