Hallan restos de ADN en una carta con amenazas, enviada a un edil que quitó el gobierno local de O Porriño al PP

a. martínez VIGO / LA VOZ

GALICIA

Manuel Carrera recibió una nota anónima con descalificaciones en las que le acababan advirtiendo que tuviera mucho cuidado y «ojo porque te puede pasar alguna cosa», amenaza que también se extendía a sus hijas, «que pueden recibir alguna nota sabiendo quién es su padre»

04 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La Guardia Civil avanza en la investigación para identificar al autor de una carta con amenazas que recibió el año pasado el primer teniente alcalde de O Porriño, Manuel Carrera. Este representante fue presidente local del PP y concejal con el exregidor popular Nelson Santos, pero tras escindirse de este partido y formar su propio grupo su apoyo fue determinante para que gobierne el PSOE en este municipio.

Los investigadores han encontrado restos de ADN en la misiva que podrían ayudar a esclarecer este suceso. Estas pruebas serán cotejadas con muestras de ADN de al menos un vecino del municipio que es sospechoso por haber amenazado con anterioridad a este representante político. Manuel Carrera recibió una nota anónima con descalificaciones en las que le acababan advirtiendo que tuviera mucho cuidado y «ojo porque te puede pasar alguna cosa», amenaza que también se extendía a sus hijas, «que pueden recibir alguna nota sabiendo quién es su padre».

Tenía una intencionalidad política, puesto que en la misma le reprochaban que hubiera prestado su apoyo para la conformación de un gobierno socialista en el municipio. No es la primera vez que este edil es objeto de descalificaciones anónimas. Durante la campaña de las elecciones municipales denunció en el Juzgado de Instrucción número 3 de O Porriño una serie de escritos sin firma con injurias hacia su persona.

Un petardo a la alcaldesa

Al mismo tiempo, la Guardia Civil también intenta averiguar la identidad de la persona que puso un petardo en el parabrisas del coche oficial de la alcaldesa el mes pasado. La regidora, Eva García de la Torre, recibió al día siguiente otra carta manuscrita anónima con descalificaciones, con un formato similar al que recibió su compañero Manuel Carrera.