El alcalde de Ferrol recurrirá a una moción de confianza para su primer presupuesto

Rocío Pita Parada
Rocío Pita Parada REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

JOSÉ PARDO

«Lo que cabría preguntarse es qué alternativa hay a gobernar nosotros ocho», desafía Suárez

12 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Amparado por la aritmética, el alcalde de Ferrol, Jorge Suárez, vinculará la aprobación de los presupuestos del 2017 a una cuestión de confianza. Significa que si no obtiene el apoyo de la mayoría absoluta de la corporación, trece concejales de 25, se abriría la puerta a la presentación de una moción de censura en un mes. Pero dado el reparto del arco municipal y pese al escenario político que deja la ruptura del pacto con el PSOE, las posibilidades de que eso ocurra son mínimas. Y eso permitiría en cierto modo que las cuentas salgan adelante con mayor facilidad. Porque transcurrido ese plazo sin que esa hipotética moción de censura prosperase, los presupuestos quedarían aprobados de forma inicial.

La adopción de esta medida se acordó en la asamblea de hace unos días de Ferrol en Común, la marca de las mareas en la ciudad naval, formación que integran EU, Anova e inscritos en Podemos a título individual. La vinculación a unas cuentas es el único caso en el que una cuestión de confianza no supone la salida directa del alcalde si no la supera. Suárez dice estar dispuesto a asumir las consecuencias «xurídicas e legais» que se deriven de ello, pero ve lejos su salida del gobierno. «Estou lexitimado polos trece votos da investidura. Se algún decide cambialo para apoiar á voceira do PP tería que explicarse, pero sería dificilmente explicable», declara.

Defendió que gobernar la ciudad con solo ocho concejales -los seis de FeC, además de las dos concejalas no adscritas expulsadas por el PSOE- es posible: «O que cabería preguntarse é que alternativa hai a gobernar nosoutros oito, que terán que responder outros». Reconoce la sobrecarga que supone la redistribución de áreas pero, ironiza, «os activistas somos activos, é algo que vén de seu». Aunque ya desliza que asumirá menos labor de representación institucional.

«A min non me gusta o fango»

Tras sacar adelante una modificación de crédito facilitada por la abstención del Partido Popular, asegura que mantiene «aberta a vía ao diálogo tanto cos anxos como cos demos», dijo en un guiño a las acusaciones del BNG de «pactar co diaño». La guerra dialéctica con sus exsocios de gobierno no cesa. El regidor aseguró que el gobierno es más estable desde la ruptura con los socialistas. Y lo comparó con «un globo cando solta lastre». Sus palabras escocieron en el PSOE, que pidió que ponga los pies en la tierra: «A min non me gusta o fango», replicó.