Se trata de un helicóptero no tripulado de 17 kilos de peso y que está equipado con cámaras que permiten recoger datos a un kilómetro de distancia
25 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Un helicóptero no tripulado, bautizado Lúa, de 17 kilos de peso y equipado con cámaras que permiten recoger datos a un kilómetro de distancia, empezará a funcionar en la campaña de incendios de la Xunta de este año. El vehículo, que realizará solamente vuelos nocturnos para no interferir en el funcionamiento del resto de las aeronaves, fue presentado ayer en el aeródromo de Rozas (Lugo).
El helicóptero lo está desarrollando la empresa Babcock (antigua Inaer), socio tecnológico de la Xunta en el proyecto Civil UAVs Initiative, junto a Indra. La compañía, según explicó su director ejecutivo, Ángel Rodero, confía en obtener la acreditación como operador de esta aeronave este mes de mayo.
El helicóptero, con tres horas de autonomía de vuelo, efectuará un seguimiento nocturno de la evolución de los incendios. También se podrá utilizar para la detección de los incendiarios. Jacobo Pastor Fernández-Posse, ingeniero de certificaciones, ensayos y producción, explicó que la aeronave permitirá mejorar la seguridad y la eficacia de los dispositivos contra incendios.
Junto al helicóptero Lúa presentaron un segundo prototipo, Lumes, de tamaño superior, que se encuentra en proceso de certificación por parte de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA). Esta aeronave por control remoto volará a 4.000 metros de altura, por encima de las aeronaves tripuladas que combatirán el incendio. Su misión, según Fernández-Posse, será la de coordinar al resto de los aviones en vuelo y llevará un sistema para controlar el tráfico aéreo.
En la jornada que se desarrolló en Rozas presentaron la primera embarcación no tripulada, que desarrolla Seadrone en Vigo, y que botarán en junio. Funcionará como laboratorio de tecnologías y aplicaciones, y se usará para rescate, salvamento, vigilancia y control medioambiental.